Desde que comenzó a promover eventos en medio de la pandemia del coronavirus, la UFC adoptó un estricto protocolo de seguridad que incluyó períodos de cuarentena en habitaciones de hotel y múltiples pruebas a las que deben someterse los involucrados en el espectáculo. Esta semana, que precede a la celebración de la edición 270 del UFC, prevista para el sábado (22), en Anaheim (EE.UU.), por primera vez, los luchadores y su equipo no se verán obligados a pasar por el protocolo, siempre que demuestren que están completamente vacunados contra la COVID-19. La información fue divulgada inicialmente por el sitio web ‘MMA Junkie’.
Los atletas y sus equipos vacunados aún tendrán que presentar una prueba negativa antes de abordar a Anaheim, así como hacerse la prueba antes de salir de la ciudad. Los individuos no vacunados serán testeados dos veces durante la semana -la primera cuando lleguen al hotel de los peleadores y la segunda el jueves- y también estarán sujetos a cuarentena en sus habitaciones hasta que el resultado de la primera prueba sea negativo.
El nuevo protocolo fue establecido por la Comisión Atlética del Estado de California y cuenta con la aprobación de la UFC. A pesar de la flexibilización de las reglas de prueba y cuarentena, el uso de máscaras en entornos comunes seguirá siendo obligatorio, independientemente de la de vacunación.
Para ESPN, Andy Foster, director ejecutivo de la Comisión Atlética de California, reveló que si un individuo vacunado muestra algún síntoma relacionado con la enfermedad, se le hará la prueba de COVID-19. También según el director, los médicos presentes en el lugar durante la semana estarán atentos a estos casos.
UFC 270 marca el primer evento numerado de la entidad en la temporada 2022. En el evento principal, la edición tendrá una disputa entre Francis Ngannou y Ciryl Gane, por la unificación del título de peso pesado. En el evento coestelar, el brasileño Deiveson Figueiredo intentará recuperar su cinturón de peso mosca (125 lb) contra el mexicano Brandon Moreno.