Luego de ser noqueado por Uriah Hall este sábado (31), Anderson Silva volvió a cuestionar su retiro de las MMA durante una entrevista con la cadena estadounidense ‘ESPN’. Sin embargo, al menos en opinión del presidente de la UFC, Dana White, el final de su carrera no solo es una decisión correcta, sino también una necesidad.
En conversación con los periodistas poco después del final del evento, el dirigente no escatimó en el discurso y reveló que lamentó haber permitido que se llevara a cabo la disputa, en una tarjeta con sede en Las Vegas (EE.UU.). Apareciendo descontento con el desempeño del ex campeón del peso medio (185 lb), White recordó que aún tiene contrato con el brasileño, pero el octágono de la UFC no volverá a tener su presencia.
«Hicimos un trato antes de la pelea de que ella sería la última», reveló Dana White. “Dijo en una entrevista que UFC era una familia cuando Lorenzo Fertitta estaba aquí. Mira, lo amamos y lo extrañamos, pero siempre he sido bueno con Anderson y ahora no me siento bien conmigo mismo por dejarlo hacer esta pelea. Lo tratamos muy bien y recibió muy bien para pelear. Lo tratamos como a una familia y no debería haberlo dejado hacer esta pelea”.
Críticamente, el presidente de la UFC restó importancia al buen desempeño de Anderson Silva en las primeras rondas. Según su análisis, esto solo fue posible cuando ninguno de los atletas adoptó una postura agresiva. Este escenario podría ser muy diferente si el brasileño se enfrentara a algunos de los nuevos talentos del deporte.
“Luchó contra un tipo que ataca poco. Pelearon en una tarjeta en ‘ESPN’ e intercambiaron solo 11 golpes en la segunda ronda. Si lucha contra alguno de estos jóvenes salvajes, estaría en problemas. Uriah Hall desató algunos golpes. Mira a Anderson después de la pelea, no se pudo levantar para dar una entrevista. Lo respeto, es una leyenda del deporte y de la empresa”, recalcó.
Finalmente, cerca de cumplir 46 años de edad, Silva no tendría motivos para arriesgar su salud en una competencia que requiere tanto del físico del atleta.
“Sabía que tenía razón y esa noche lo demostró. Nunca debe volver a pelear. No estoy tratando de evitar que haga nada, él tiene una pelea con nosotros y nunca más peleará aquí. Espero que te jubiles. No quiero sentarme aquí y decir tonterías sobre él, pero tiene casi 46 años. A menos que necesites defender tu vida o tu familia, nadie con 46 debe pelear”, concluyó.