Los rumores apuntan a que la actual campeona de peso gallo de UFC (135 lb), Raquel Pennington, defenderá su cinturón en el siguiente asalto ante Julianna Peña. Aunque aún no es oficial, la probable pelea deja a Kayla Harrison, recién llegada a la empresa, sin muchas opciones viables.
Consciente de ello, el judoka bicampeón olímpico ‘piensa fuera de lo común’ y sugiere un desafío de gran magnitud para mantenerse activa. Excompañera de entrenamiento de Amanda Nunes, la estadounidense desafía a la ‘Leoa’ a una superpelea que pondría en juego un hipotético cinturón inaugural BMF femenino.
En una entrevista exclusiva con el de Ag. Fight durante la reciente ceremonia del Salón de la Fama de UFC en Las Vegas (EE.UU.), Kayla Harrison destacó que mencionó el nombre de Amanda como posible oponente -a pesar de que la Leoa está teóricamente retirada- debido a la postura adoptada por la brasileña, dando señales de que puede volver al servicio activo.
Un hipotético enfrentamiento por el puesto de ‘peleadora más dura’ de la empresa enfrentaría a una dos veces campeona olímpica y excampeona de peso ligero (155 lb) de la PFL y a una bicampeona de UFC (peso gallo y peso pluma).
“Me encantaría crear un legado (en UFC) que dure toda la vida. Tengo que conseguir el título, tal vez tenga que conseguir que alguien regrese y pelee conmigo, ya veremos. Sé que Brasil ama a las brasileñas, pero yo también te amo a ti, Brasil (risas). No me gusta desafiar a las personas retiradas. Ella (Amanda Nunes) está retirada, está feliz. Pero escuché que está hablando de mí. Quiero hacerle saber que estoy aquí y listo. ¿Quieres pelear? No necesitamos pelear por el título de peso gallo. Podemos luchar por el cinturón ‘BMF’ femenino. ¿Quieres luchar por ello? Luchemos por ello. Estoy lista”, propuso Harrison.
¿Solo negocios?
A pesar del desafío sugerido, al parecer Kayla Harrison no tiene ningún tipo de resentimiento o desacuerdo con Amanda. Al contrario. Excompañeros del ‘American Top Team’, los deportistas convivieron durante años sobre las colchonetas y construyeron una relación amistosa, como revela la propia estadounidense. Sin embargo, buscando ampliar su legado en las MMA, la judoka quiere desafiarse a sí misma contra la ‘Leoa’, considerada por muchos como la mejor de todos los tiempos en este deporte.
“Sí, solíamos entrenar juntos. No tengo nada malo que decir sobre Amanda . Íbamos a los cumpleaños de nuestros hijos, entrenábamos juntos. Yo era amiga de Nina, su esposa. No es personal para mí, puedo separar eso. Puedo tenerte respeto, admirarte y ser tu amigo y también tener un trabajo que hacer (luchar). Para mí no es nada personal. Son sólo negocios», reflexionó la estadounidense.
A sus 34 años, Kayla Harrison tiene un récord de 17-1 en MMA profesional. Su debut en UFC fue en la cartelera centenaria de UFC 300, en abril de esta temporada.
En aquella ocasión, la judoka dominó ampliamente a la excampeona Holly Holm y saldó la cuenta con una sumisión en el segundo asalto. La actuación, sumada a su popularidad, hizo que la estadounidense debutara en el ranking de menos de 135 lb en el cuarto lugar, colocándose así en una posición privilegiada de cara a una posible futura pelea por el título.