El octágono del UFC 320, este sábado (4), en Las Vegas (EE. UU.), será el escenario de un clásico choque entre especialidades opuestas: grappler contra striker. Por un lado, el brasileño André Muniz, conocido como ‘Sergipano’, especialista en jiu-jitsu que busca recuperar su estilo ganador. Por el otro, el estadounidense Edmen Shahbazyan, un peligroso striker, que disfruta de dos triunfos consecutivos.
Originario de Sergipe, atraviesa una etapa delicada en su carrera . Con tres derrotas en sus últimas cuatro apariciones en la UFC, el nativo de Minas Gerais sabe que la pelea de este fin de semana es crucial para mantenerse entre los mejores de la división de peso mediano (185 lb). Aun así, se mantiene centrado en su estrategia y confía plenamente en su juego de suelo.
«Realmente será una pelea de luchador contra golpeador, no es ninguna sorpresa. Voy a pelear con lucha de principio a fin. Mi jiu-jitsu volverá a hablar más fuerte, y voy a llevar esta sumisión a Brasil», dijo el cinturón negro en una entrevista exclusiva con Ag Fight.
Terminando en el radar
Consciente de la calidad de su oponente, el luchador de Minas Gerais espera un duelo equilibrado, pero cree que su especialidad podría ser la clave para asegurar la victoria. Para él, controlar la distancia e imponer el ritmo en el grappling serán claves durante todo el combate.
«Será una gran pelea, dura, contra un gran atleta, duro y de renombre. (Pero la pelea) terminará con una sumisión en el segundo o tercer asalto», proyectó.
Mientras que Shahbazyan debería intentar mantener la pelea de pie para aprovechar su boxeo, André Sergipano debería adoptar una estrategia más conservadora, intentando acortar la distancia y llevar la pelea al suelo, donde suele brillar. El resultado podría reubicar al ganador en una posición más cómoda dentro de la organización.
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