Poco después de noquear a Alex Poatan en el UFC 287, Israel Adesanya lanzó ‘flechas’ imaginarias hacia el verdugo, que yacía en el octágono. Luego, el nigeriano señaló a alguien en la multitud y fingió estar noqueado. El gesto fue explicado luego por el campeón de peso medio de la UFC (185 lb), quien admitió que el objetivo de la provocación era el hijo del contrincante brasileño.
La actitud fue incluso una respuesta a una provocación que sufrió Adesanya en 2017, cuando fue noqueado por Alex Poatan en kickboxing. Cuando se dio a conocer el resultado, el hijo del brasileño subió al ring y, junto al nigeriano, fingió estar noqueado y se tumbó en el suelo -para simular cómo quedó Israel tras ser golpeado por su padre- . Seis años después, el nigeriano devolvió la provocación de la misma manera.
“Recuerdo que la primera vez que me noqueó, en Brasil, su hijo subió al ring y se hizo el muerto a mi lado. Yo estaba como, ‘Pequeño imbécil, te voy a dar una nalgada si tu papá no lo hace’. Pero sí, miré a su hijo, lo vi y lo señalé y dije: ‘Oye, oye’ (y me desmayé), solo para recordárselo. Lo conocí (Poatan) detrás del escenario, estamos bien. Es un gran campeón, un guerrero”, explicó Adesanya, durante la rueda de prensa posterior al espectáculo.
Apoyo familiar
Al salir del octágono, el equipo de reporteros captó el apoyo que Alex Poatan recibió de su familia en el UFC 287. En el video se puede ver a la hermana del brasileño, también luchadora profesional, así como a su hijo, entre lágrimas, abrazándose. su padre después de su derrota ante Adesanya.
