La victoria sobre Victoria Leonardo el pasado sábado (7), en su debut en la UFC, no dejó a Melissa Gatto completamente satisfecha. Consciente de su potencial, la joven promesa pretendía mostrar un poco más de su talento, pero reconoció que el largo tiempo de inactividad pasó factura e influyó en su desempeño dentro del octágono de la edición 265, celebrada en Houston (EE.UU.).
En una entrevista exclusiva con el informe de Ag Fight después del partido, Melissa admitió que los casi tres años que pasó fuera de acción, principalmente debido a una suspensión por dopaje, la hicieron sentir como una debutante en el deporte a pesar de tener ya nueve peleas en su récord.
Aún cobrando una actuación más destacada, la peso mosca (125 lb) celebró su debut victorioso en la principal organización de las MMA del planeta, que llegó por una interrupción médica en el intervalo entre la segunda y tercera ronda, cuando el médico responsable del evento encontró una posible fractura en el brazo de su oponente.
“Ojalá hubiera hecho un poco más. Creo que incluso me cubrí mucho por no haber hecho lo que pensé que podía hacer. Pero después de dos años, creo que fue genial estar de regreso. Y estoy muy feliz de estar de regreso aquí, de vivirlo todo de nuevo. Es como si hubiera vuelto a debutar en las MMA”, comentó Melissa Gatto, antes de completar.
“Sentí que no era yo quien estaba allí. Es como si me estuviera viendo luchar, lo diferente que fue para mí. Como dije, sentí que estaba haciendo mi debut en las MMA nuevamente, sentí que nunca había hecho eso en mi vida, y tenía que darlo todo”, explicó.
Con el resultado del pasado sábado, Melissa Gatto suma ahora siete triunfos -cuatro de ellos por sumisión- y dos empates en su currículum profesional de las MMA, en el que debutó en 2016. Además de la suspensión por dopaje, el debut de la brasileña de 25 años en la UFC se pospuso en otras tres ocasiones debido a peleas canceladas.