El 13 de abril, durante el evento del centenario de UFC 300, Chael Sonnen recibió la noticia de que quedó incluido en el Salón de la Fama de la compañía debido a su icónica pelea contra Anderson Silva en 2010.
Luego de ser tomado por sorpresa y agradecimiento por la nominación, el ruidoso estadounidense hablador aparentemente cambió de postura cuando decidió rechazar el estatus de miembro del selecto grupo UFC.
En una reciente aparición en el programa ‘The MMA Hour’, Sonnen se sinceró al explicar que no se considera merecedor de tal honor individualmente como deportista. ‘Spider’, por ejemplo, ya estaba en el Salón de la Fama en el ‘Pioneers Wing’. Como no quedó exaltado por sus servicios generales a la organización, sino para una pelea específica, el ex retador por el cinturón de peso mediano (185 lb) rechaza el apodo del Salón de la Fama de la liga.
«¿Me consideraría (un miembro del Salón de la Fama)? No, no me considero. O lo eres o no lo eres. Pero no, no lo creo. Creo que tú (como luchador) tienes que entrar. No creo que pueda haber una pelea (para ti). No creo que eso me convierta en un miembro del Salón de la Fama, creo que eso hace que esa pelea sea digna del Salón de la Fama. Esa ha sido siempre mi interpretación. Los chicos que entran por separado, siento que están en una categoría diferente», dijo Chael.
Recuerda la fatídica pelea
Con un aura imbatible y previamente invicto en UFC, Anderson se preparaba para otra defensa de su cinturón de peso medio (185 lb), pero esta vez contra un rival que no lo respetaba. Al contrario. Uno de los precursores de la llamada ‘trash talk’, Sonnen construyó una acalorada rivalidad con el brasileño debido a sus contundentes declaraciones.
Fuera de la jaula, Chael predijo un dominio que, en ese momento, rayaba en lo increíble. Pero dentro del octágono, el estadounidense demostró su punto al usar su lucha de alto nivel para frenar el impulso de Spider y controlar las acciones durante casi los 25 minutos completos de la pelea programada. Sin embargo, en la quinta y última ronda, cuando estaba por detrás en el marcador, Anderson sacó un ‘conejo de la chistera’ y sometió a Sonnen con un triángulo cerrado.
