Si los deportes de combate se basaran solo en los resultados, Aljamain Sterling estaría viviendo un momento único y sería adorado por la comunidad de MMA. La razón es simple, ya que el estadounidense tiene seis victorias consecutivas y el título de peso gallo de la UFC. Sin embargo, el campeón de la categoría cayó en desgracia con parte del público, precisamente por su comportamiento en el polémico choque ante Petr Yan.
En marzo, Sterling se enfrentó al ruso y destronó al rival por descalificación. En esa ocasión, Yan aplicó una rodilla ilegal en el cuarto asalto y perdió el título de peso gallo, porque el adversario no pudo permanecer en el enfrentamiento. Así, parte de la afición empezó a agredir en redes sociales al actual campeón de la categoría, quien mostró su irritación en numerosas ocasiones. En una entrevista con el sitio web ‘MMA Junkie’, Sterling volvió a criticar a sus enemigos y se defendió, señalando que el equivocado en la historia no es él, sino Yan, quien aplicó un golpe prohibido. En cualquier caso, el número uno de la división estaba abierto a ajustar cuentas con el enemigo.
“No guardo rencor, pero cuando alguien es una mala persona, simplemente no quiero estar cerca. Me baso en la buena energía, el buen rollo. Al final, lucharemos. Saldaremos cuentas y podremos resolver la situación. Si pretendemos ser amigos o cordiales, lo haremos. Pero no tengo ningún respeto por este tipo. Habla muchas tonterías sobre algo que hizo y me critican por ello, que es lo más extraño que he visto en mi vida”, se quejó Sterling.
Al aceptar la revancha con Yan, Sterling indicó que le gustaría que sucediera en sus términos. Recientemente, Dana White, líder de la UFC, declaró que el segundo duelo entre los rivales es la pelea a realizarse en peso gallo e indicó que podría ocurrir en octubre, en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos).
El campeón, en cambio, señaló que su preferencia es que el ajuste de cuentas ocurra, nuevamente, en Estados Unidos. Como teme lo peor si se enfrenta cara a cara con White, como Francis Ngannou y Jon Jones, el estadounidense dio un paso atrás y dijo que podía ceder a los intereses de la empresa.
“Para ser 100% honesto, me encanta la cita, pero no me gusta el lugar. Principalmente por los tiempos que tendríamos que luchar. Solo tuve una de mis peores actuaciones, quizás no la peor, pero tuve algunos problemas. Sería bueno volver a pelear en Nueva York o Las Vegas. Pero pelear el 30 de octubre estoy bien con eso”, explicó el campeón de peso gallo.
“Sabes lo que es decirle que no a Dana, así que no creo que haya mucha negociación aquí. Siendo 100% honesto y transparente, no creo que me vayan a dar la oportunidad de negociar esto. No estoy buscando entrar en una guerra para molestar a Dana. Entonces, si eso es lo que quieren, eso es lo que quieren”, concluyó.
