Retirado oficialmente desde febrero de 2019, Georges St-Pierre nunca ha ocultado a nadie que la única oferta que lo haría abandonar el retiro y volver a ponerse los guantes sería una súper pelea contra Khabib Nurmagomedov, actual campeón de peso ligero de la UFC (155 lb). Recientemente, con el propio ruso y su equipo también mostrando interés en un duelo, ha aumentado la especulación sobre el posible regreso del canadiense.
Pero, a pesar del claro interés en la pelea, el ex campeón de peso welter de la UFC (170 lb) y campeón de peso medio (185 lb) admite que está experimentando un conflicto mental entre regresar o no al servicio activo, si es que realmente este enfrentamiento ofrecido por la organización. Cabe recordar que St-Pierre se retiró del deporte en diciembre de 2013 y regresó para una última actuación en el octágono en noviembre de 2017, frente a Michael Bisping, a quien terminó, ganando el cinturón de la división hasta 185 lb.
“¿Por qué volver? ¿Por qué no volver? Sólo vivimos una vez. Este es el dilema al que me enfrento ahora, ¿sabes? Si tengo la oportunidad de hacer eso y todas las estrellas se alinean y no lo hago, porque todavía puedo luchar ahora. Diría que estoy en mis mejores años. ¿Me arrepentiré cuando tenga 50 años? No lo sé”, reflexionó ‘GSP’, antes de continuar.
“Estoy un poco satisfecho. ¿Sabes lo que quiero decir? El contentamiento para el atleta es la muerte. Terminó. Ha terminado cuando esté satisfecho. Para volver, estoy en un estado mental en el que no estoy seguro. Las estrellas deberían estar perfectamente alineadas”, concluyó St-Pierre, en una entrevista con la cadena de televisión canadiense ‘TSN’.
Considerado como uno de los campeones más dominantes en la historia de la UFC, por su reinado en la división de peso welter, Georges St-Pierre fue el dueño del cinturón de 170 lb entre 2008 y 2013, cuando abdicó el título para alejarse del deporte. En total, el canadiense acumula 26 victorias y dos derrotas en su carrera.
