Cuando Dana White anunció, hace poco más de un mes, que Sean Strickland se enfrentaría al ruso Abus Magomedov en la pelea estelar de la cartelera programada para el 1 de julio, en Las Vegas (EE.UU). El estadounidense, número 7 en el ranking del peso mediano de la UFC, medir fuerzas con un rival que solo tiene una pelea bajo la bandera de la organización parecía un riesgo alto e innecesario. Ahora, ‘Tarzán’, decidió romper su silencio sobre la situación.
En declaraciones ofrecidas al canal de ‘Youtube’ ‘Helen Yee Sports’, Strickland explicó que la UFC se le acercó con una oferta para pelear contra Abus Magomedov y habría sido, en cierto modo, coaccionado por la organización para aceptar la pelea contra el ruso. Esto se debe a que, según el luchador, la UFC lo habría amenazado con dejarlo en la «nevera» unos meses si rechazaba la propuesta.
“Entonces, aquí está la cosa, amigos, voy a hablar con ustedes directamente. Siempre lo hago, soy honesto. Trato de serlo, a menos que esté tratando de acostarme contigo. Pero voy a ser sincero contigo porque no estoy tratando de joderte. El UFC vino a mí y me dijo: ‘Sean, le preguntamos a un par de los 10 mejores y dijeron que no. Así que te vamos a encerrar de seis a ocho meses hasta que alguien venga por ti o pelees con este tipo’. Y dije, ‘UFC, esto es una m*****’. Pero me gustaría pelear, me gusta ganar dinero’. Así que dije que sí y aquí estamos”, destacó Strickland.
La polémica de Sean Strickland
Curiosamente, Sean Strickland no es el único peso mediano clasificado entre los 10 mejores de la división que ha recibido un oponente no clasificado como un «regalo» de la UFC, lo que genera dudas en el mundo de la pelea. El brasileño Paulo Costa también tuvo una polémica pelea anunciada recientemente por la entidad, en la que fue elegido para enfrentar a Ikram Aliskerov en la cartelera del UFC 291, el próximo 29 de julio. Tras las repercusiones negativas, Dana White -presidente de la liga- se hizo público para contrarrestar las críticas.