Esta semana, Merab Dvalishvili no escuchó cosas buenas de Dana White. El presidente del UFC detonó la ‘postura leal’ del atleta de Georgia con su amigo y compañero de entrenamiento Aljamain Sterling, en detrimento de una posible oportunidad de disputar el cinturón de peso gallo (135 lb). Tras la fuerte declaración, el campeón de la categoría, Sean O’Malley, relativizó la situación y, en cierto modo, salió en defensa de su rival de la división.
A través de su canal de Youtube, ‘Sugar’ asegura que el conflicto de intereses en el que se encuentra Merab es un lío complicado. Sincero, el peleador de 28 años también admitió que no le gustaría competir contra sus compañeros de equipo. Sean O’Malley incluso enumeró a algunos de sus compañeros en el ‘MMA Lab’ de UFC en 135 lb que podrían, en el futuro, cruzarse en su camino.
«Entiendo, no me gustaría pelear con un compañero de equipo. Pero ya soy rico y exitoso. Si no lo estuviera ya, diría: ‘Joder’. ¿Tu harías? No lo sé, es una situación complicada. Es una situación muy realista que estos tipos lleguen a la cima, Kyler (Philips), Mario (Bautista), Marcus (McGhee), estos tipos son jodidamente peligrosos. Entonces no lo sé, creo que es algo que tenemos que decidir sobre la marcha. Pero no quisiera luchar contra ellos. No quiero pelear con un compañero de equipo”, opinó Sean.
Punto muerto
Número dos del ranking y procedente de nueve victorias consecutivas, Dvalishvili, analizado por sus méritos deportivos, ya podría haber competido por el cinturón de menos de 135 lb. Sin embargo, en su ascenso, el campeón fue Sterling, su amigo y compañero de equipo. Para ‘hacerle espacio’ a su compañero, ‘The Funk Master’ proyectó un ascenso al peso pluma (135 lb), pero cambió de planes tras ser noqueado por O’Malley en UFC 292 y con un embrollo por resolver.