A finales de octubre, Robert Whittaker sufrió una dolorosa derrota dentro del octágono. No sólo desde el punto de vista deportivo, sino también físico. Después de todo, el australiano vio sus dientes completamente dislocados mientras Khamzat Chimaev intentaba asegurar un estrangulamiento por detrás en el primer asalto. Compitiendo a un alto nivel con gran vulnerabilidad en la región, como luego admitió, el excampeón de peso medio (185 lb) decidió tomar medidas y reveló que reemplazó todos sus dientes inferiores después de la pelea en UFC 308, en Abu Dhabi (EAU).
En una reciente aparición en el ‘MMArcade Podcast‘, Whittaker reforzó que el problema en sus dientes inferiores era antiguo y que ya había sufrido situaciones similares en enfrentamientos recientes, como en el duelo con Dricus du Plessis. Por lo tanto, el daño causado por Chimaev fue una especie de colmo que lo motivó a deshacerse permanentemente de esta vulnerabilidad. Por eso, el australiano se quitó todos los dientes inferiores y se los repuso. Durante el proceso, reveló que es posible que los expertos incluso hayan encontrado la razón que hizo de la región su ‘talón de Aquiles’ durante tanto tiempo.
«Siempre he tenido mal los dientes inferiores, siempre me ha faltado uno en los últimos diez años. Siempre me han atacado porque no son estables. Debería haberme deshecho de ellos hace años. ¿Sabes algo? Iré más allá y diré que Chimaev me hizo un favor. Se deshizo de sus dientes. El miedo a lastimarme los dientes inferiores, a que se movieran, siempre apestaron. No puedo morder una manzana desde que tenía 19 años. Siempre fueron malos, ya debería haberme ocupado de eso. Ya no están, no los necesito. Mi vida es mejor sin ellos. Como dato curioso, cuando me lo quitaron, descubrieron un gran quiste en mi mandíbula. Y aparentemente piensan que las infecciones dentales podrían provenir de ahí. Entonces todo sucede por una razón», resaltó Robert.
Periodo de descanso
Luego del revés sufrido por ‘Lobo’, Whittaker se desmarcó significativamente de una posible pelea por el título de peso medio, pues cayó al cuarto lugar del ranking y viene alternando victorias y derrotas en sus últimas seis presentaciones en UFC. Consciente de ello, el veterano reveló que no tiene prisa por regresar al servicio activo, indicando que se tomará un tiempo para recuperarse al 100% física y mentalmente. Sin fijar su regreso, el excampeón indicó que podría volver a verse en el octágono alrededor de junio de 2025.
