UFC Des Moines cerró la noche con el choque de los aspirantes al título de peso gallo, Cory Sandhagen y Deiveson Figueiredo.
En el primer asalto, ‘Deico’ intentó un derribo que logró concretar al estadounidense para luego construir un intento de sometimiento, pero Sandhagen pudo escapar y revirtió la pelea con castigo y ‘ground and pound’ contra el brasileño que estaba a ras de lona intentando, en vano, una palanca de pierna.
En el segundo asalto, el estadounidense intercambió golpes contra el brasileño que terminó nuevamente buscando la pelea en el piso. Sin embargo, Cory terminó encima propinando castigo con el golpeo y con la pierna cruzada que lastimó a ‘Deico’ a tal punto que dejó de responder ante el castigo para que el árbitro detuviera la pelea y decretara el TKO.
Así las cosas, Sandhagen vuelve a la senda del triunfo tras perder contra Umar Nurmagomedov y pidió una oportunidad por el título de peso gallo luego de que el campeón de la división se enfrente a Sean O’ Malley.
Adiós al invicto de Nickal
El peleador holandés, Reinier de Ridder marcó la sorpresa de la noche en UFC Des Moines tras noquear de un rodillazo a las zonas blandas del, hasta entonces, luchador invicto de la organización, Bo Nickal en el segundo asalto.
El primer asalto estuvo determinado por la lucha de ambos pero no concretaron mayor daño el uno sobre el otro. Sin embargo, el jiu jitsu del europeo se mantuvo muy superior al wrestling del norteamericano pues ‘RDR’ logró dominar a ras de lona al luchador con su espalda completamente pegada del tatami.
Ya en el segundo, el peleador europeo determinó la falla en Nickal y aprovechó su rodilla para rematar una serie de golpes que comenzó desde el rostro hasta darle un rodillazo de poder cuando Nickal descuidó la zona hepática. De esta manera, Reinier de Ridder continúa su racha invicta dentro del octágono de la UFC y puso fin a una racha de siete victorias consecutivas que traía el estadounidense.