En los dos últimos eventos de la compañía, los representantes de Brasil ganaron solo dos de los diez enfrentamientos programados. Este sábado (1.º), en el UFC Vegas 76, ocho peleadores del país tomarán medidas para tratar de aumentar el desempeño reciente de solo un 20%. Los deportistas encargados de intentar ahuyentar la mala etapa serán: Ariane Lipski, Melissa Gatto, Joanderson Brito, Brunno Silva, Karol Rosa, Luana Carolina, Ismael Bonfim y Elves Brenner.
Dentro de la cartelera, los brasileños solo podrán acumular, sin embargo, siete victorias en el mejor de los casos. Después de todo, Lipski y Gatto se enfrentan en un duelo 100% verdeamarillo, válido para la cartelera principal del evento. Las dos pesos mosca (125 lb) viven momentos opuestos, con Lipski impulsada por la victoria y Gatto en busca de redención tras sufrir la primera derrota de su carrera en MMA.
También en la cartelera principal vuelve a la acción una dupla que debutó con especial protagonismo en UFC Río. Tras noquear a Gregory Rodrigues en enero, Brunno Ferreira intenta mantener su récord al 100% en la liga ante Nursulton Ruziboev, entre los medianos (185 lb). Ahora Ismael Bonfim, que noqueó con un rodillazo volador a Terrance McKinney en la última cartelera de la empresa en Brasil, mide fuerzas con Benoit St-Denis en la división de peso ligero (155 lb).
Ya en la cartelera preliminar, cuatro brasileños más están en acción. Karol Rosa se enfrenta a Yana Santos, esposa de Thiago Santos, en la división de peso pluma (145 lb). Presionada por la mala etapa, Luana Carolina se enfrenta a la debutante Ivana Petrovic. Repleto de dos victorias, Joanderson Brito se enfrenta a Westin Wilson. Finalmente, Elves Brenner, compañero de entrenamiento de Charles Oliveira, se batirá en duelo con Guram Kukateladze.
Pelea principal
En el main event del UFC Vegas 76, duelo improbable entre los medianos (185 lb). Número 7 del ranking, Sean Strickland se enfrenta a Abus Magomedov, que no está entre los 15 primeros de la categoría. En una entrevista exclusiva con Ag Fight, el estadounidense admitió que aceptó el desafío de ‘alto riesgo’ debido a una motivación financiera.