Hace una semana, la tan esperada pelea entre Mike Tyson y Jake Paul, entonces prevista para el 20 de julio, fue pospuesta por consejo médico. Y, como prometió ‘Most Valuable Promotions’, empresa que promociona el evento, este viernes (7) finalmente se definió una nueva fecha.
A través de un comunicado oficial enviado a la prensa, ‘MVP’ reprogramó el duelo de boxeo entre el veterano y el YouTuber para el 15 de noviembre.
Se han conservado los detalles del evento. Por tanto, la sede de la tarjeta permanecerá en el estadio ‘AT&T’ de los ‘Dallas Cowboys’, en Texas (EE.UU.), con derechos de retransmisión exclusivos del gigante del streaming Netflix, tal y como estaba previsto en el acuerdo original.
Incluso se conservó el evento coestelar del show entre Amanda Serrano y Katye Taylor, que vale un título mundial. ‘MVP’ destaca que la nueva fecha se definió para garantizar que los competidores tuvieran derecho al mismo tipo de preparación, buscando la igualdad entre Tyson y Paul.
«Nuestro equipo ha trabajado diligentemente con todas las partes involucradas para reprogramar esta pelea monumental para una fecha que garantice que Jake Paul y Mike Tyson estén completamente preparados, tengan el mismo tiempo de entrenamiento y nos permita realizar el evento en el estadio AT&T a mitad de temporada de los Cowboys. Apreciamos la destacada dedicación, colaboración y flexibilidad de nuestros socios en Netflix y AT&T Stadium. Paul vs. Tyson es el evento deportivo más intergeneracional de la historia y estamos comprometidos a llevar a los fanáticos de todo el mundo esta inolvidable noche de boxeo, en vivo a nivel mundial en Netflix. Esperamos verlos a todos el viernes 15 de noviembre en un choque del que se hablará durante generaciones», anunció la compañía en un comunicado enviado a la prensa.
La diferencia de edad divide opiniones
Cuando suba al ring contra Jake Paul en noviembre, Mike Tyson ya tendrá 58 años, frente a los 27 del influencer. La diferencia de edad de tres décadas divide la opinión de los fanáticos, quienes están preocupados por la integridad física del excampeón mundial de boxeo de peso pesado.
Incluso Dana White, presidente de UFC, disputó la pelea. El reciente episodio en el que el veterano necesitó atención médica tras sufrir una úlcera aumentó el llamado de algunos aficionados a la cancelación del partido.
