Diez años en Bellator, Patrício ‘Pitbull’ es actualmente una de las grandes estrellas de la organización. Durante este período, el potiguar tuvo 22 peleas en la jaula, ganó torneos y se convirtió en campeón en dos categorías, peso pluma (66 kg) y peso ligero (70 kg). Con esta década defendiendo la bandera de la franquicia, el brasileño atravesó grandes batallas, pero tuvo la misión de resaltar las tres más emblemáticas.
El primero en esa lista fue la revancha contra Pat Curran. Después de perder el primer partido, en enero de 2013, por decisión dividida, el rival le dio el derecho a un nuevo partido y el brasileño no perdió la oportunidad de devolver el revés para ganar el título de peso pluma.
“Esta fue la primera vez que fui campeón mundial. Fue una emoción única. Logré mi objetivo principal, que era ser un campeón. Y la victoria todavía estaba en una revancha, ya que lo había perdido en una decisión dividida en enero de 2013. Recuerdo que en ese momento discutíamos mucho en Internet… Es inexplicable, no tengo palabras para describir lo que sentí en ese momento. Era campeón mundial, me había preparado 20 años para eso. Fue el pico para mí”, recordó.
El segundo lugar fue un duelo contra un viejo rival del brasileño: Daniel Strauss. El duelo tuvo lugar en abril de 2017 y fue la cuarta vez que ambos luchadores se enfrentaron. Además, el título de peso pluma estaba en juego, ya que el potiguar lo había perdido precisamente ante su oponente, en noviembre de 2015, por decisión de los jueces. La venganza de ‘Pitbull’ estaba de moda con una sumisión.
“Me enfrenté a Daniel Straus cuatro veces. Perdí en nuestra tercera pelea, en noviembre de 2015, por puntos. Incluso hoy, tengo mis dudas sobre si perdí esa pelea. Fue una pelea muy cerrada. Pero de todos modos, tomó el cinturón, y en abril de 2017 hice una nueva pelea contra él y reanudé el cinturón, y todavía tengo el título hoy. De cuatro peleas, gané tres. En esta cuarta pelea, cuando se retomó el título, mi hijo estaba en la audiencia. Era la primera vez que mi hijo iba a la arena y salí victorioso. Fue muy especial, porque pude dedicar la victoria a mi hijo allí en la arena”, dijo.
El tercero más importante marcó una intensa rivalidad. Patricio se enfrentó a Michael Chandler en mayo de 2019. Este oponente ya había vencido a su hermano Patricky, lo que aumentó la enemistad entre ellos. Antes de enfrentarse, abusaron de la ‘charla de basura’, estimulando aún más la confrontación, que ganó al brasileño por nocaut, además del cinturón liviano.
“La tercera pelea más sorprendente de mi carrera fue contra Michael Chandler. Un tipo que todos decían que podía vencer a Khabib Nurmagomedov (campeón de UFC), un luchador muy duro que, desafortunadamente, había vencido a mi hermano dos veces. Y todavía había toda esa charla, diciendo que iba a golpear a toda mi familia, y me las arreglé para ganar y vengar a mi hermano con un minuto de pelea. Gané el segundo título y tener el cinturón en casa, representando su cabeza, es cerrar con broche de oro las tres peleas más emblemáticas de mi carrera”, concluyó.
