En un deporte donde un profesional puede garantizar una ventaja sobre su oponente desde la apariencia previa a la pelea, como lo demuestra el brasileño Alex Pereira, por ejemplo, tener una apariencia menos intimidante puede no darle la misma credibilidad a un atleta, como parece ser el caso de Paddy Pimblett. Pero, a pesar de creer que lo subestiman por su apariencia, el inglés trata el tema con buen humor.
Después de someter a Bobby Green en la cartelera principal de UFC 304, el pasado sábado (27), Pimblett bromeó sobre el efecto que su apariencia parece tener en la percepción que sus oponentes tienen de su talento como luchador. Para ‘The Baddy’, el estadounidense, su última víctima en el peso ligero (155 lb), cayó en la misma trampa que el resto de deportistas que hasta ahora se han enfrentado a él en la empresa.
«La gente pensó que iba directamente a intentar derribarlo, y les dije todo lo que no necesitaba. La gente subestima mis golpes. No creen que pueda cambiar… Tenía un delantero entrando (mis piernas). Sí, me sorprendió. Pero como dije, todos me subestiman solo porque parezco una niña de 14 años», bromeó Pimblett, en la conferencia de prensa posterior a UFC 304.
Se mantiene la racha invicta de UFC
Con su triunfo sobre Bobby Green el pasado sábado, Paddy Pimblett mantuvo su récord invicto en UFC. En la organización desde 2021, el inglés ganó los seis combates en los que disputó, cuatro de ellos por la vía rápida, un récord que debería garantizarle un lugar en el ranking de peso ligero en la próxima actualización de la lista.