En un deporte donde cada vez más atletas buscan la provocación y la ‘charla basura’ para vender sus peleas, Charles Oliveira siempre ha mantenido su posición en contra de tal práctica. Sin embargo, su oponente este sábado (10), Beneil Dariush, parece estar siguiendo el mismo patrón, pero en los últimos tiempos ha cambiado un poco su postura.
Luego de ver la pelea, originalmente programada para mayo, pospuesta un mes y reprogramada para el UFC 289, a pedido del excampeón del peso ligero, Dariush no ocultó su frustración y se quejó públicamente por la demora en la realización del duelo. En otra ocasión, hace aproximadamente una semana, el iraní volvió a adoptar una postura más agresiva de palabra y afirmó que el enfrentamiento contra ‘Do Bronx’ sería un “dominio absoluto” a su favor.
A pesar de eso, en una entrevista exclusiva con UOL, Charles Oliveira restó importancia a las declaraciones recientes de Dariush y enfatizó que nada de lo que se pueda decir antes interfiere con la pelea en sí. El atleta de Chute Boxe, Diego Lima, también se mostró «endurecido» en relación a la situación, ya que muchos de sus oponentes en el pasado reciente utilizaron la misma estrategia y fueron incapaces de desestabilizarlo psicológicamente.
“No me importa lo que digan (los rivales). Pueden hablar, pueden criticar, pueden vender (la pelea) de la misma manera que yo la vendo. No cambiará mucho. Cuando la red se cierre será una gran guerra. Es un gran luchador, al igual que yo. Estoy listo para esto, quiero sorprender al mundo una vez más. El león de peso ligero sigue rugiendo, tengo hambre, quiero volver a ser campeón”, afirmó ‘Do Bronx’.
Oliveira vs Dariush en UFC 289
Originalmente programado para llevarse a cabo en UFC 288, en mayo, la pelea entre Charles Oliveira y Beneil Dariush fue reprogramada para el 10 de junio, para la pelea coestelar de la edición número 289, que se llevará a cabo en Vancouver, Canadá. La pelea podría elevar al ganador a la posición de próximo retador al cinturón del peso ligero de la UFC, que actualmente es propiedad del ruso Islam Makhachev.