Cerca de hacer su primera defensa del cinturón de la UFC, Francis Ngannou ya comienza a analizar el futuro de su contrato con la organización. Oficialmente, el enfrentamiento contra Ciryl Gane, en el UFC 270, el 22 de enero, es la última pelea del camerunés en la liga. No obstante, si gana y fusiona los títulos, este acuerdo se puede ampliar con más compromisos. Sin embargo, la tendencia es que el backstage de la negociación sea conflictivo.
En una entrevista con la cadena estadounidense ‘ESPN’, el peso pesado dejó claro que, aunque mantenga su corona, no volverá al octágono con las mismas condiciones que su anterior contrato. Una de las razones de esta actitud es que el atleta tiene el ojo puesto en futuras peleas boxísticas, tanto que ha intercambiado provocaciones con Tyson Fury, leyenda de la modalidad.
“Ya no pelearé por $500.000, $600.000. Terminó. Acepté esta pelea por motivos personales, porque quiero asegurarme de que, independientemente de ser justo, puedo defender que completé las ocho peleas (del contrato)”, afirmó.
Pese a recalcar que ya no pretende recibir la misma cantidad de su actual bolsa, Ngannou no cerró la puerta a una renovación de contrato con la compañía, sino que impuso una condición muy clara: poder hacer combates de boxeo. El camerunés incluso reforzó el pedido de la organización para promover sus duelos en el noble arte.
“Cien por ciento (quiero boxear). Hemos estado discutiendo (sobre combates de boxeo) durante un año y parece que han estado de acuerdo. Creo que hagas lo que hagas, independientemente del evento, si la UFC está involucrado, será más grande. Esto es incuestionable. Entonces sí, si boxeara, me gustaría que la UFC estuviera conmigo. Honestamente, la única razón por la que estamos aquí es que, en algún momento, no hubo buena fe en ello. No entiendo porqué no pudimos llegar a un acuerdo (para renovar)”, agregó ‘The Predador’.
Conocido como uno de los peleadores con más poder de pegada en la organización, Francis Ngannou confirmó su estatus y alcanzó el lugar más alto en el peso pesado de la liga de las MMA más grande del mundo en marzo de 2021, cuando noqueó al entonces campeón Stipe Miocic en el UFC 260. Antes de derrotar al estadounidense, el africano ya había superado a grandes nombres de la división, como los excampeones Caín Velásquez y Junior ‘Cigano’.
