Este sábado (27), Francis Ngannou tiene la oportunidad de vengarse de la derrota más importante que sufrió en su carrera. En 2018, el camerunés fue superado por Stipe Miocic y se quedó sin el cinturón de peso pesado de la UFC. Ahora, en el evento principal de UFC 260, el luchador tiene la oportunidad de devolver el revés a su oponente y, para eso, recordó el primer enfrentamiento entre ellos y citó el aprendizaje que adquirió de ese encuentro.
Hasta llegar al primer duelo ante el estadounidense, Ngannou entabló una secuencia de seis victorias, cinco de ellas por nocaut. Embalado, el africano pretendía repetir la forma en que venció a sus rivales contra Miocic, pero se sintió frustrado por la actuación estratégica de su rival. En una entrevista con el sitio web ‘BT Sports’, el retador hizo una autocrítica y garantizó que no repetirá los mismos errores de esa pelea.
“En ese momento, fui tras él y fue uno de los errores más grandes que he cometido. Fui a noquearlo, y es algo que nunca había hecho antes, a pesar de que casi todas mis peleas las gané por nocaut. Pero siempre vino de forma natural, nunca lo busqué. La vez que fui tras él, no lo hice bien”, dijo el camerunés que está en la UFC desde 2015.
Sin embargo, Ngannou fue cuestionado sobre si realmente fue un error ir al ataque contra Miocic ya que derrotó a sus oponentes de esta manera, con nocauts relámpago, en sus últimos enfrentamientos. Para el luchador, sus recientes victorias llegaron de forma natural, sin haber forzado ninguna situación.
“En mis últimas cuatro peleas, no busqué un nocaut en el primer asalto y terminaron sucediendo. Veamos cómo va esta vez”, explicó.
Número uno en el ranking de peso pesado, Francis Ngannou viene de cuatro victorias consecutivas en la UFC, todas por nocaut o nocaut técnico. La última vez que el luchador pisó el octágono más famoso del mundo fue en mayo de 2020, cuando venció al surinamés Jairzinho Rozenstruik con tan solo 20 segundos de combate.
