Natan Schulte promete nueva versión en la temporada 2023 de la PFL

Este viernes (14), Natan Schulte vuelve a subir a la jaula de la PFL, esta vez para enfrentarse a Stevie Ray, para comenzar una nueva temporada, la quinta en la organización. Campeón en dos ocasiones -2018 y 2019- del torneo del peso ligero de la liga, el brasileño busca corregir los errores que lo llevaron a quedarse fuera de los playoffs del pasado año y volver a pelear por el título, que aún garantiza al ganador el premio de un millón de dólares.

En una entrevista exclusiva con el informe Ag. Fight, Schulte habló sobre las lecciones que aprendió de la última temporada y reveló lo que pretende hacer de manera diferente en 2023. Según el catarinense, un cambio de enfoque en el inicio de las peleas se verá a partir del combate contra Ray, este viernes. Si antes los ligeros pesaban su ímpetu en los primeros rounds, para evitar el cansancio al final de las disputas, ahora Schulte promete agresividad desde el inicio, incluso por la mayor puntuación en caso de victoria por la vía rápida en la PFL.

“Creo que tal vez comience la pelea un poco antes. Acelerar el pie ya en la primera vuelta, sin miedo a quizás cansarse, como creo que tienen la mayoría de los deportistas. yo no tengo ese problema. Ya noté que cuando estoy peleando, no importa cuán cansado esté en el tercer o quinto asalto, por lo general mi oponente está el doble de cansado que yo. Creo que este problema no tengo que tener miedo. Soy un atleta que empieza un poco más lento, pero ya he cambiado un poco en mis últimas dos peleas. Esto es algo que ya he discutido con mis entrenadores y ya lo hemos cambiado. Entonces, creo que marcará la diferencia esta temporada”, explicó Schulte.

Método de disputa de PFL

A diferencia de la mayoría de las organizaciones de MMA en todo el mundo, la PFL funciona con una temporada regular y un sistema de playoffs. Durante la primera parte de la competencia, los ocho competidores de cada categoría tendrán dos peleas y los cuatro con más puntos clasificarán a la etapa final, donde se jugarán las semifinales y la gran final, con un premio de un millón de dólares y el cinturón del año en juego.

El sistema de disputas, por tanto, favorece a aquellos luchadores que más anotan. Por lo tanto, las victorias simples en la decisión de los jueces valen tres puntos, mientras que los triunfos por la vía rápida, ya sea por sumisión o por nocaut, reciben puntos extra. Si la sumisión o nocaut llega en el primer asalto, el atleta se lleva tres puntos más, totalizando seis puntos en un solo combate, si la victoria antes de los 15 minutos previstos se produce en el segundo asalto, será de cinco puntos y en el tercer asalto, el competidor recibe cuatro puntos. En los empates, los dos luchadores se llevan a casa solo un punto y en la derrota, obviamente, el atleta derrotado se va sin un punto.