En la pelea que subió el telón de la cartelera principal del UFC 270, protagonizado por el camerunés Francis Ngannou y el francés Ciryl Gane, el ecuatoriano Michael Morales impresionó al estadounidense Trevin Giles y lo arrolló por la vía rápida, como parte de una pelea válida por el peso wélter.
La batalla comenzó con Trevin Giles colocándose al frente con una fuerte mano derecha que hizo tambalear a Morales, el cual se defendía de excelente manera de los intentos de derribo de su oponente. Acto seguido, el suramericano atrapó al norteamericano con una izquierda, luego lo derribó con una derecha corta y comenzó a lanzar puños de martillo hasta que el árbitro detuvo el choque.
Said Nurmagomedov fulminó a Cody Stamann
El ruso Said Nurmagomedov alcanzó su segunda victoria consecutiva en la franquicia más importante de MMA del planeta, esta vez ante el estadounidense Cody Stamann, en un encuentro válido por la división peso gallo y que terminó de una explosiva.
En las primeras de cambio, Nurmagomedov comenzó de manera explosiva seguido de varios ataques giratorios al cuerpo de Stamann, quien recibió una guillotina extremadamente apretada, ante la que nada poco pudo hacer para detener la acción.
Pereira mantiene racha positiva ante Fialho
El portugués Andre Fialho ingresó al UFC 270 como un desconocido, a pesar de poseer una larga experiencia en Bellator y la PFL. Sin embargo, enfrente tenía al brasileño Michel Pereira que con tres victorias consecutivas buscaba extender su dominio en la clase wélter, hecho que consiguió de gran manera.
Fialho salió para comenzar la primera ronda con mucha presión. A medida que avanzaba la pelea, Michel Pereira se lanzaba fuera de la jaula con fuertes conexiones y un jab que aterrizaba sobre Fialho. En el segundo, Pereira salió con golpes dañinos en el cuerpo, lo que frenó a Fialho a medida que avanzaba la ronda.
Finalmente, Michel Pereira conectó un golpe en la ingle que detuvo la pelea brevemente en la última oarte. De vuelta en marcha, Andre Fialho y Michel Pereira continuaron con los golpes de ida y vuelta mientras sonaba la campana para terminar la pelea.