En la pelea estelar de la noche de UFC Fight Island 7 Max Holloway enfrentaba a Calvin Kattar por la división de peso pluma (145 lbs).
Ambos peleadores basaron su juego en el boxeo, situación que aprovechó Holloway para conectar más golpes aprovechando su velocidad ante un Kattar que respondía pero en menor cantidad.
En el segundo asalto Holloway estuvo a punto de noquear a Kattar con una combinación explosiva de golpes al cuerpo y al rostro que hicieron temblar a su rival y emocionaron al público asistente en Abu Dhabi. Sin embargo Kattar logró escuchar el campanazo final y su rostro ensangrentado mostraba el daño recibido.
Para el tercer capítulo se mantuvo la dinámica con Holloway llevando el ritmo de la pelea y el público metido en el bolsillo logró conectar muchos más golpes que su rival en una pelea que hasta ahora se desarrollaba de pie.
La lluvia de golpes no cesaba en el cuarto asalto por parte de Holloway quien por un momento parecía noquear a su oponente sin embargo este se mantenía en pie intentando lanzar algunos golpes sin éxito y con el referi tentado a parar el combate salvaguardando la integridad de Kattar.
El quinto round fue de trámite, Holloway continuó con el repaso de boxeo que ofreció ante su rival e incluso se tomó el tiempo de burlarse bajando la guardia sin que Kattar pudiese tocarlo. La decisión de los jueces no se hizo esperar y la anhelada victoria por decisión unánime llegó para Holloway.