Si alguien aún tenía dudas sobre si la enemistad entre Jorge Masvidal y Colby Covington era real o solo un ‘teatro’ para vender más paquetes de pago por visión, ‘Gamebred’ trató de dejar claro que no hay nada falso en la rivalidad entre ambos. ellos. Durante el día de los medios del UFC 272, realizado el pasado miércoles (2), el peso wélter descartó cualquier posibilidad de acercamiento con su excompañero después de la pelea.
Según Masvidal, Covington cruzó la línea al usar a sus hijos para atacarlo en las entrevistas previas a la pelea. ‘Gamebred’ también recordó que su oponente tiene la costumbre de apelar a la vida personal de sus rivales para tratar de desestabilizarlos psicológicamente y promover sus peleas, por lo que no aceptará una disculpa tras el final de la batalla.
En su último duelo, Colby fue derrotado por Kamaru Usman, en una disputa por el título del peso wélter, y apenas finalizado el choque se dirigió a su rival para explicarle que todas las provocaciones e insultos hecho por él anteriormente habría sido solo una estrategia de marketing para llamar más la atención sobre el duelo.
“Él nunca se atrevería (a darme la mano después de la pelea). No se acercaría a mí en ninguna circunferencia ni nada por el estilo. No se pondría a sí mismo en una posición en la que pudiera patearle el trasero de nuevo, especialmente porque habló de mis hijos», detalló Masvidal.
“Mis hijos no venden pay-per-view. La gente no dice, ‘Oh, está hablando de sus hijos. Voy a sintonizar ahora’. Habló sobre el padre de (Kamaru) Usman, lo llamó todo tipo de cosas y la madre de Usman, y luego vas a decir: ‘Son solo negocios. Solo vendo pay per view. Yo te amo hermano’. Dijo durante meses que no estrecharía la mano de este hombre. Muestra lo cobarde que es y lo serpiente que es. Dirá cualquier cosa y luego, cuando las luces estén sobre él, cuando sea el momento de ser un hombre, hará lo que haga», añadió.
Colby Covington y Jorge Masvidal tenían una relación muy estrecha cuando ambos aún estaban dando sus primeros pasos en sus carreras de MMA, actuando bajo la bandera del ‘American Top Team’. Sin embargo, con el paso de los años, la amistad que existía entre los luchadores se convirtió en rivalidad y generó numerosos intercambios de ofensas y hasta amenazas por ambos lados.
La situación tomó tales proporciones que ambos fueron expulsados del equipo del que formaban parte, pero en realidad solo Covington abandonó la academia, traspasándose al ‘MMA Masters’, también con sede en Florida (EE.UU.). Por su parte, Masvidal logró convencer al dueño de ‘ATT’, Dan Lambert, para que lo dejara seguir formando parte del equipo.