La trayectoria que tomó Kayla Harrison, al migrar del judo a las Artes Marciales Mixtas y comenzar su historia en la modalidad teniendo enorme éxito y dominio sobre sus rivales, arroja comparaciones justificables con Ronda Rousey, quien trazó un camino similar hasta convertirse en la principal responsable de la popularización de mujeres en las MMA. Sin embargo, aunque la atleta de la PFL aún no ha logrado las hazañas y la importancia de su compatriota en el deporte, hay quienes ya ven en ella una versión mejorada de la ex campeona de la UFC.
Uno de los principales defensores de esta tesis es Ali Abdelaziz, entrenador de la ex bicampeona olímpica. En una entrevista en el sitio web ‘TMZ Sports’, el agente elogió a su cliente y afirmó que, a pesar de respetar la historia construida por Ronda Rousey en MMA, Kayla Harrison tiene la capacidad de superar su legado y destacar aún más en la modalidad.
“Realmente creo que hoy Kayla Harrison es la mujer más mala del mundo. Sin faltarle el respeto a nadie. Hay muchas mujeres que son increíbles, pero creo que es una especie diferente. Ella es todo lo que Ronda Rousey debería ser. Ella es Ronda Rousey 6.0. Ella es Ronda Rousey, Ronda ha hecho mucho por este deporte, yo respeto a Ronda, pero las expectativas de la gente por Ronda eran muy altas. ¿Adivina qué? Cualquiera puede esperar lo mismo de Kayla, pero a un nivel mucho, mucho más alto”, dijo Abdelaziz.
En el judo, donde ambas comenzaron sus trayectorias en las artes marciales, Kayla Harrison puede ser aclamada como una atleta de mayor importancia que su compatriota. Mientras que el mejor resultado de Ronda fue un tercer lugar en los Juegos Olímpicos de Beijing en 2008, Harrison ganó dos medallas de oro en Londres y Río de Janeiro en 2012 y 2016 respectivamente, así como múltiples títulos mundiales.
En MMA, la historia aún favorece a la ex campeona de peso gallo (135 lbs) de la UFC. Además del cinturón de la organización más grande del mundo, en comparación con el título de peso ligero (155 lbs) conquistado por Kayla Harrison en el torneo de la PFL, Rousey fue durante años una de las principales estrellas del deporte en el mundo, independientemente del género. poniendo en evidencia el MMA femenino, un estado aún lejos de la realidad de Harrison.
