Cualquiera que piense que el resultado adverso obtenido por Mackenzie Dern en su más reciente aparición en el octágono sacudió su confianza en la UFC está equivocado. En octubre, en Las Vegas (EE.UU.), la especialista en jiu-jitsu se enfrentó a Marina Rodríguez y, luego de 25 minutos de combate, vio llegar a su fin su racha de cuatro victorias al ser derrotada por decisión unánime. Como el duro revés impidió a la luchadora acercarse a la disputa por el título de peso paja (115 lb), informó que está ansiosa por el momento de recuperarse en la organización.
Dispuesta a volver sobre su camino hacia la cima del peso paja de la UFC, Mackenzie, en una entrevista en el sitio web ‘MMA Junkie’, mostró humildad y no lamentó la derrota sufrida por Marina. Por el contrario, la profesional resaltó que el revés fue importante, pues logró ampliar su percepción del deporte y asimilar que aún necesita ajustar su juego para pelear en igualdad de condiciones con los mejores atletas de la división.
Cabe destacar que, en las MMA, hay una máxima que indica que un luchador evoluciona más en derrotas que en victorias, y el especialista en jiu-jitsu coincide en que el revés muchas veces no siempre representa algo malo en la carrera del profesional y, si bien explorado, incluso puede dar frutos en el futuro. Motivada para demostrar que aprendió una valiosa lección frente a Marina, Mackenzie, quien se está recuperando de una lesión en la rodilla, prometió que mostrará una clara evolución en su regreso al octágono.
“Creo que si hubiera ganado esta pelea con Marina, la UFC me habría puesto a pelear por el título. Esta perdida fue muy importante, porque no creo que estuviera lista. En ese momento, pensé que estaba lista, pero tan pronto como me di cuenta de que había perdido, estuvo bien. Esta pérdida fue en un buen momento. Quizás, recibiría una paliza en la oportunidad por el título. Definitivamente, creo que todo está en el momento adecuado. Ahora, creo que puedo vencer a cualquiera entre los cinco primeros. Obviamente, no puedo cometer errores ni nada por el estilo, pero creo que la concentrada y bien entrenada Mackenzie puede vencer a cualquiera de las chicas, pase lo que pase, sin importar quién tenga el cinturón. Estaré preparada”, declaró la deportista, antes de completar.
“No pude demostrar cuánto había mejorado en mi pelea con Marina. No estaba avanzando tanto como lo hago normalmente. Siempre necesitamos aprender, ganar o perder. Incluso en mis victorias, siempre vuelvo a la mesa de trabajo para intentar mejorar en diferentes cosas. No estoy feliz de haber perdido, pero no estoy desconsolada. Tan pronto como terminó la pelea, supe que tenía alrededor de diez cosas que necesitaba mejorar. Al día siguiente volví al gimnasio, hablé con mi entrenador y decidimos en qué tenía que trabajar. La próxima vez, si es una revancha con Marina u otra pelea, verán a una luchadora mucho más versátil. Seguro que esta derrota fue una de las mejores cosas que me pasó, solo para tener una mejor visión de cómo puedo mejorar”, concluyó.
Mackenzie Dern, de 28 años, se encuentra entre la élite del peso paja de la UFC y ocupa la quinta posición en el ranking de la categoría. En los deportes de combate, la profesional era conocida por su jiu-jitsu de alto nivel, pero cambió su estatus a medida que evolucionó en el golpe y se convirtió en una completa luchadora. La atleta comenzó su carrera en las MMA en 2016 y debutó en la organización en 2018. Para la compañía, la especialista en arte gentil compitió en ocho peleas, ganó seis, cuatro por sumisión y perdió dos veces. Sus principales triunfos fueron sobre Nina Ansaroff, Randa Markos y Virna Jandiroba.
