Hace poco más de una semana, Zion Clark hizo su debut profesional en las MMA. Nacido sin ambas piernas, debido a una rara enfermedad llamada Síndrome de Regresión Caudal, que impide el desarrollo de parte de la columna, el luchador llamó la atención del mundo por su condición y no defraudó. La victoria por decisión unánime sobre Eugene Murray, sin embargo, parece ser solo el primer paso en una trayectoria llena de grandes objetivos trazados por el luchador.
En una entrevista con la web ‘MMA Fighting’, el deportista de 25 años recordó el esfuerzo y la dedicación invertidos en el deporte en las últimas temporadas para llegar a las artes marciales mixtas. Proveniente de la lucha libre y acostumbrado a ser blanco de dudas y desconfianzas, Zion proyecta una meta atrevida en la nueva modalidad: ganar un cinturón.
“Durante los últimos cinco años, aprendí y desarrollé mis propias técnicas que complementan la forma en que me muevo. Fue un camino difícil, y todavía es difícil para la mi****, para ser honesto contigo. La lucha es dura. A nadie le gusta que le peguen en la cara, pero estoy lo suficientemente loco como para hacerlo. Y lo volveré a hacer pronto. [Quiero] llegar a la cima. Quiero un cinturón. Simplemente así. Pero por ahora, tengo que llegar primero, tengo que concentrarme en aprender”, dijo.
Recientemente, el luchador reveló su sueño de llegar a la UFC, el principal evento de MMA en el mundo, en el futuro. Otra de las metas de la atleta es competir en los Juegos Olímpicos de París, en 2024, representando al equipo norteamericano en lucha libre, además de participar en los Juegos Paralímpicos del mismo año en la carrera en silla de ruedas.
