Shaquille O’Neal, uno de los grandes nombres de la historia de la NBA, ganó cuatro veces en la liga de baloncesto más grande del mundo, tres con los Lakers de Los Ángeles y una vez con el Heat de Miami. Sin embargo, lo que pocos saben es que el ex pivote tiene una relación especial con MMA y atribuye a la modalidad todo su éxito en la cancha.
En una entrevista con ‘ESPN’, O’Neal reveló que cuando comenzó a practicar MMA fue el momento en que dio un salto de calidad en las canchas. Eso es porque, en su época, el deporte era muy físico y, al practicar artes marciales, obtuvo un entrenamiento diferente para ser uno de los jugadores más dominantes en la liga.
“MMA es la razón por la que me convertí en campeón. Siempre jugué al baloncesto. No fue suficiente. Porque cuando jugaba baloncesto, era más una pelea. Entonces, cuando entrené MMA con Jon Burke, un amigo mío en Orlando (EE.UU.), regresé en la mejor forma de mi vida. Eso fue en el 2000 (año del primer título con los Lakers)”, dijo el ex jugador de la NBA.
Shaquille también destacó el hecho de que sus mejores años en la NBA estuvieron totalmente relacionados con las MMA. Según el ex basquetbolista, quien fue presentado al juego por el ex luchador Ultimate, Vitor Belfort, admitió que cuando dejó de pelear, tuvo una caída en el rendimiento y, tan pronto como regresó a la práctica, pudo ganar su último título.
“MMA es algo que siempre ha mantenido mi corazón acelerado. Fue algo que me interesó mucho. Soy un chico físico. Me gusta la fisicalidad. Los atletas de MMA son probablemente los mejores atletas del planeta. El entrenamiento que pasan, las cosas físicas por las que pasan, he participado en casi todas las peleas importantes de UFC, estos tipos son especímenes. Desearía poder golpear a algunos de esos tipos de la NBA que solía enfrentar. Así que definitivamente soy fanático de las MMA”, agregó el estadounidense.
El Salón de la Fama de la NBA, Shaquille O’Neal, es considerado uno de los mejores pivotes que han pasado por el deporte. Con cuatro títulos de liga, el jugador hizo una asociación histórica con Kobe Bryant, en Los Lakers de Los Ángeles. Además de los logros en la liga, fue campeón mundial con el equipo estadounidense en 1994 y los Juegos Olímpicos en 1996.
