El jefe de la UFC, Dana White, ha informado en más de una ocasión que no obligará a sus empleados a vacunarse contra el COVID-19. Sin embargo, por muy poderosa que sea su organización de MMA, tendrá que cumplir con una exigencia que viene directamente de la Casa Blanca. Según la postura del gobierno estadounidense, todos los viajeros que lleguen a Estados Unidos a partir del 8 de noviembre deberán presentar una prueba de vacunación.
En un memorando enviado esta semana a los luchadores, entrenadores y empresarios, la UFC comunicó que los atletas internacionales y sus equipos se enfrentarán a un obstáculo para actuar en el país a partir de la fecha en cuestión y pueden verse afectados. La medida fue adoptada por la organización debido a los cambios en las políticas del gobierno, publicados el pasado viernes (15). Cabe recordar que, por más que exista un llamamiento mundial de los profesionales de la salud para que la población se vacune con el fin de reducir la propagación del COVID-19, una parte de los combatientes se posicionó en contra y otra parte mostró indecisión.
«Recientemente, el gobierno de los Estados Unidos anunció que, a partir del 8 de noviembre, los viajeros extranjeros con destino a los Estados Unidos tendrán que estar completamente vacunados y presentar una prueba de su estado de vacunación para volar a los Estados Unidos. Los viajeros totalmente vacunados también deberán presentar una prueba COVID-19 negativa realizada tres días antes del viaje. Esta política también se aplica a los extranjeros que cruzan la frontera terrestre con Canadá y México o que llegan a Estados Unidos en un ferry de pasajeros. Para ser claros, esta no es una política de la UFC. La UFC no le obliga a vacunarse. Nos limitamos a comunicar las nuevas directrices anunciadas recientemente por el gobierno de Estados Unidos. Debería considerar sus opciones, como viajar a Estados Unidos, antes de que esta nueva política gubernamental entre en vigor, o, si lo prefiere, hacer los arreglos necesarios para obtener la vacuna correspondiente. A partir del 8 de noviembre, para ser admitidos en Estados Unidos, todos los extranjeros que lleguen de destinos internacionales deben ser vacunados con una de las vacunas aprobadas por la OMS. Los que no estén vacunados no podrán entrar en el país», notificó la cúpula de la UFC.
Desde el comienzo de la pandemia de COVID-19 que asoló el mundo, la UFC se ha aventurado a organizar eventos de MMA y sufrió la cancelación de combates con poca antelación precisamente porque los atletas y los miembros de sus equipos dieron positivo al virus. Además, parte de los profesionales de fuera de Estados Unidos no pudieron salir de sus países de origen. Así, Dana White apostó por la ‘Isla de la Lucha’, situada en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), para que pudieran competir los luchadores perjudicados.
Hasta el momento, el único evento que la UFC celebrará fuera de Estados Unidos es la edición número 267, que tiene lugar el 30 de octubre en Abu Dhabi, es decir, antes de que entre en vigor la medida adoptada por el gobierno estadounidense. Queda por ver cómo afectará la nueva política de viajes a la programación de la mayor organización de las MMA del mundo.