Tercer lugar en el ranking Ultimate de peso mediano (185 lb), Khamzat Chimaev fue confirmado como el próximo retador al cinturón de la categoría, que actualmente ostenta Dricus du Plessis. Y al menos a los ojos de las bolsas de apuestas, el ruso se perfila como el favorito para la pelea contra el sudafricano, programada para el 16 de agosto, en Chicago (EE.UU.), en la cartelera UFC 319.
En la apertura del mercado en el sitio web especializado ‘BetOnline.ag’, Chimaev apareció con una ‘odd’ (probabilidad) de -190. Por lo tanto, para obtener una ganancia de $100 de una victoria de ‘Wolf’, un apostador debe invertir $190. Por otro lado, el campeón aparece como perdedor en las probabilidades iniciales, para sorpresa de parte de la comunidad de MMA.
A pesar de ostentar actualmente el estatus de soberano de la división, Du Plessis no parece tener la confianza de los ‘oddsmakers’, profesionales encargados de evaluar y definir las probabilidades de cada resultado. Considerado como el perdedor por las casas de apuestas para el partido del 16 de agosto, el sudafricano apareció con probabilidades iniciales de +165. Esto significa que con una apuesta segura de $100 a que ‘DDP’ ganará, usted podría embolsarse $165.
Khamzat Chimaev contra Dricus du Plessis
El duelo entre Khamzat y Dricus enfrenta hoy a dos de los nombres más importantes de la división de menos de 185 lb de UFC. Considerado como una futura estrella desde su debut en la compañía, el peleador ruso finalmente logra llegar a una pelea por el título, impulsado por un currículum impecable. En total, Chimaev tiene 14 victorias, 12 de ellas por la vía rápida, y ninguna derrota. En el octágono, ‘Lobo’ ya ha superado a rivales de renombre, como Gilbert Burns y los excampeones Kamaru Usman y Robert Whittaker, por ejemplo.
Por su parte, Du Plessis parece haber obtenido finalmente el reconocimiento que merece. Después de capturar el título de peso welter con una controvertida victoria sobre Sean Strickland en enero de 2024, el sudafricano realizó dos exitosas y convincentes defensas del título contra el excampeón Israel Adesanya y en la revancha con Strickland. Incluso las críticas y burlas hacia su estilo de lucha poco ortodoxo parecen haber disminuido en los últimos tiempos y, hoy en día, el sudafricano definitivamente goza de un mayor respeto por parte de los fanáticos y los expertos por igual.
