Este sábado (14), en Las Vegas (EEUU), Ketlen Vieira tiene una pelea decisiva en su carrera. En una gran etapa en el peso gallo de UFC (135 lb), la brasileña se enfrentará a Raquel Pennington, quien también está en ascenso en las MMA, y quien gane debería estar más cerca de disputar el título de la categoría. Sin embargo, aún consciente de la importancia del choque, la brasileña en entrevista exclusiva con Ag. Fight, puso los pies en el suelo y evitó proyectar su próximo paso en la organización de MMA más grande del mundo.
Clasificada por las casas de apuestas como favorita para la pelea contra Pennington, Ketlen informa que su enfoque está en el presente, es decir, ganar en el UFC Vegas 67 para iniciar la campaña por la pelea por el cinturón de peso gallo. Y el motivo de la cautela adoptada por la brasileña tiene una explicación, ya que estaba citada para convertirse en aspirante al título de la categoría, en 2019, si vencía a Irene Aldana, pero, al regresar de una grave lesión en la rodilla, quedó noqueada, perdiendo su invencibilidad en las MMA y la oportunidad de enfrentarse a Amanda Nunes. Tras sorprenderse al pensar en el futuro, la atleta aseguró que había aprendido del error y garantizó no volver a cometerlo.
“Por supuesto que me imagino peleando por el cinturón, no diré que no, pero mi enfoque está en Pennington. Anteriormente, pensar demasiado en el cinturón se interponía en mi camino. Tenía muchas expectativas y fue un poco decepcionante. No quiero atajos, quiero pasar por lo que tengo que pasar. Creo mucho en Dios y no era el momento. Llegué a la UFC después de solo dos años de las MMA, eso es muy poco tiempo. Hay gente que lleva muchos años y todavía no ha tenido la oportunidad. Esto fue muy prematuro en mi vida. Pongo mi vida en la mano de Dios. Si no estaba destinado a ser, no estaba destinado a ser. Si está escrito que voy a pelear por el cinturón y ser campeón, eso pasará. No importa si voy a hacer dos, tres o diez peleas más. Los planes de Dios no pueden ser frustrados. Pasará”, declaró la luchadora.
Pero aunque Ketlen evita proyectar una posible oportunidad por el título de peso gallo de la UFC, no es ajena a lo que sucede en la división. Tanto es así que la atleta demostró saber que una victoria sobre Pennington sería de suma importancia para su currículum. Cabe señalar que si por un lado la brasileña, segunda clasificada de la categoría, superó a las veteranas Holly Holm y Miesha Tate, sus excampeonas. Por el otro, ‘Rocky’, número cinco de la división, superó a cuatro rivales de manera consecutiva e igualó su mejor etapa en la organización. Por eso, el brasileña resaltó la calidad de la americana y predicó el respeto para no volver a ser pillada en acción.
“Ambas estamos viviendo la mejor etapa. Mis méritos los tengo por haber ganado a dos excampeonas y ella tiene que venir de cuatro victorias consecutivas. Vivimos momentos similares y será una gran pelea. Ahora, pienso en evolucionar en el octágono, dejarme llevar en cada pelea, ir recogiendo atletas experimentadas. Mi preocupación es esta, ponerme a prueba. Es una atleta con mucha experiencia, sabe jugar en todas las áreas de las MMA. Mi enfoque era estar preparada para todo tipo de adversidades que pudiera tener en la lucha”, concluyó.
Ketlen Vieira, de 31 años, viene del judo y destaca en las MMA precisamente por su grappling, pero mejora su pegada en cada pelea. La brasileña inició su carrera en el deporte en 2014 y, dos años después, llegó invicta a la UFC. En la modalidad, manauara disputó 15 combates, ganó 13 y perdió dos veces. Actualmente, la atleta ocupa la segunda posición en el ranking de peso gallo y sueña con disputar el título de la categoría. Sus triunfos más importantes fueron sobre Cat Zingano, Holly Holm, Miesha Tate y Sara McMann.