El ataque de Jorge Masvidal a Colby Covington, realizado en marzo, en Florida (EE.UU.), sigue dando de que hablar en la comunidad de las MMA. Este jueves (12), el veterano compareció ante el Undécimo Circuito Judicial de Florida para una audiencia sobre el caso. De acuerdo con el sitio web ‘MMA Fighting’, el equipo legal de ‘Gamebred’ esperaba obtener los registros médicos de ‘Chaos’ y el reloj dañado por él. Como no se ofreció una apelación, ahora se espera que Masvidal tenga una audiencia de apelación el día 17 de agosto.
La nueva audiencia va a determinar si un acuerdo de confesión es ofrecido y aceptado por Masvidal o si la situación será llevada a juicio, programado para comenzar el día 29 de agosto. Ahora, el reloj de Covington, supuestamente dañado por su rival, se encuentra en una tienda para ser examinado. Sin embargo, el equipo de ‘Gamebred’ busca apoderarse del objeto para hacer su propia valoración de los daños. Según el informe policial, el valor de los daños causados al reloj de Covington fue de 15.000 dólares y el artículo esta valorado en 90.000 dólares. Los abogados de Colby presentaron una moción para anular la solicitud del equipo de Masvidal de obtener los registros médicos de su atleta, pero el juez rechazó esa acción.
El polémico episodio entre Masvidal y Covington ocurrió afuera de un restaurante en Florida. Jorge enfrenta dos cargos por el presunto ataque a Colby y el cargo más grave es el de asalto agravado. Según documentos judiciales, ‘Gamebred’ golpeó a ‘Chaos’ con un arma mortal que causó graves daños corporales a su objetivo. Durante una audiencia realizada en abril, se ordenó a Masvidal que se mantuviera alejado de Covington en lugares públicos. El veterano también tiene prohibido tener contacto con el rival.
La esperada pelea entre Colby Covington y Jorge Masvidal tuvo lugar en marzo, en Las Vegas, y, en ese momento, ‘Chaos’ dominó a ‘Gamebred’ durante 25 minutos. Molesto con el revés y con la postura del luchador antes, durante y después del combate, el veterano advirtió que atacaría al rival si lo encontraba en las calles. Días después, los mejores pesos wélter de la UFC (170 lb) pelearon fuera del octágono.