Considerado el ‘GOAT’ de las MMA y actual poseedor del cinturón de peso compelto lineal, Jon Jones es uno de los nombres más importantes que UFC haya consagrado jamás. Y aún como campeón de hasta 265 lb y con las credenciales que posee, el estadounidense no tiene definición alguna sobre su futuro en la empresa. De hecho, sus fans ni siquiera saben si ‘Bones’ volverá a entrar en acción una vez más antes de terminar su carrera. Pero según él, esta incertidumbre en torno a su eventual regreso está más ligada a la empresa que a él.
A través de sus redes sociales, Jones respondió a algunos ataques de sus seguidores. El estadounidense se convirtió en un objetivo después de compartir su rutina de “vacaciones” en Tailandia. Por paciencia, algunos fanáticos afirmaron que Jon sería despojado de su título y también cuestionaron su interés en enfrentar a Tom Aspinall, poseedor del título interino de la categoría. En su más puro estilo, ‘Bones ‘se absolvió de toda culpa, vinculando la situación actual a la conducta de los altos mandos de UFC.
«¿Que me quiten el cinturón? Jajaja. ¿Acaso parezco el tipo de persona a la que le importan esas cosas? Ustedes (los fans) se equivocan de tema. Le conté mis planes a UFC hace mucho tiempo. No entiendo por qué no les han dicho esto todavía», escribió Jon Jones en su cuenta oficial de ‘X’ (anteriormente Twitter).
Dana White garantiza una superpelea
Aunque Aspinall admite que se le acabó la paciencia y Jones no parece tan interesado en volver a la competición con tanta urgencia, Dana White garantiza que ambos estarán en rumbo de colisión en 2025, para unificar los títulos de peso pesado. Incluso con la postura confiada del técnico, algunos fanáticos ya han considerado que ‘Bones’ podría haber aceptado enfrentar a su rival inglés, pero solo al final de la temporada, para prepararse para la superpelea en sus términos.
Otros fanáticos, en cambio, sugieren que el estadounidense, de 37 años, ya informó a UFC que ya no tiene la intención de competir profesionalmente. Según esta segunda línea de razonamiento, la empresa estaría intentando convencer a Jon Jones de que se retracte de su decisión y se enfrente a Aspinall, consciente del impacto comercial que el enfrentamiento generaría para la compañía.
