La era de Jon Jones como campeón de peso semipesado (93 kg) en Ultimate ha terminado. Luego de que la organización trabajara con el duelo entre Dominick Reyes y Jan Blachowicz, para el 26 de septiembre, surgieron dudas sobre cuál sería el futuro del estadounidense en la división. Y no tardó en revelarlo.
A través de sus redes sociales, el peleador afirmó que, en conversación con UFC, abdicó el cinturón divisorio. Además, Jones dijo que solo volvería a luchar por la organización si recibía una mejor compensación financiera. Hasta ahora, Ultimate no ha comentado oficialmente sobre las declaraciones del atleta.
“Acabo de hablar por teléfono con UFC. Hoy puedo confirmar que dejo vacante el cinturón de los semipesados. Está oficialmente disponible. Ha sido un viaje increíble, sincero agradecimiento a todos mis competidores, UFC y sobre todo a la afición”, dijo el luchador, antes de completar.
“La última vez que hablé con UFC sobre mi salario, no hubo negociación. Si eso cambia alguna vez, me encantaría volver y competir de nuevo como peso pesado. Hasta entonces, disfrutaré de la UFC como fan y haré todo lo posible para cuidar de mi familia y comunidad”, expresó.
A pesar de no divulgar ninguna predicción de regreso al octágono, Jon Jones dijo que permanecerá dentro de las pruebas de la USADA (agencia estadounidense antidopaje), que se encarga de los exámenes de todos los deportistas de UFC.
“De buena fe, continuaré con el programa de pruebas (el antidopaje de la USADA) probablemente durante la próxima mitad del año o algo así. Seguiré levantando pesas y entrenando todas las diferentes artes marciales”, concluyó.
Jon Jones no pelea desde febrero de este año, cuando derrotó a Dominick Reyes, por decisión unánime de los jueces, en UFC 247 y una vez más mantuvo su título. Luego de este duelo, el estadounidense mostró interés en hacer una súper pelea contra Francis Ngannou, en el peso pesado, pero se tropezó en la negociación y, desde entonces, ha librado una guerra con la UFC por mejores remuneraciones.