Con cuatro derrotas en sus últimas cinco peleas, Johnny Walker pasó de ser una gran promesa en la división semicompleta (205 lb) a un luchador en una situación delicada en la organización. Este sábado (10), el brasileño tendrá la oportunidad de iniciar su proceso de recuperación en la entidad al subir al octágono del UFC 279, en Las Vegas (Estados Unidos), para enfrentar a Ion Cutelaba. Y para eso, el carioca impulsó un cambio importante.
Anteriormente aficionado a consumir productos a base de cannabidiol (CBD) -una de las sustancias que se encuentran en la planta Cannabis sativa, conocida popularmente como marihuana-, Johnny dejó de consumirlos alegando que le hacían daño. En conversación con la prensa durante el media day del UFC 279, el miércoles, el peso semicompleto reveló que estos productos tuvieron un efecto negativo en su cuerpo, alcanzando no solo su lado profesional, sino también el personal.
“No es nada contra el CBD, solo soy yo, mi cerebro no reacciona bien. Otras personas tal vez, pero mi cerebro, tal vez tengo TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad). Luego, cuando tomé CBD, el CBD debería calmarme. Pero el pequeño porcentaje es bueno. Todo el CBD tiene algo de THC (sustancia psicoactiva que se encuentra en la marihuana). El THC me jo***. Estaba paranoico, no confiaba en nadie. Llegué tarde al entrenamiento, no seguí mi agenda. Esto jo*** mi vida. Yo no sabia de eso. Había estado consumiendo drogas durante los últimos tres años y no me di cuenta. Ahora lo sé y dejé de tomarlo”, reveló Walker.
Cuando se le preguntó cuándo se dio cuenta de que los productos de cannabidiol estaban teniendo un efecto negativo en su cuerpo, Johnny dijo que solo se dio cuenta después de la pelea contra Thiago ‘Marreta’, en octubre del año pasado. Según el carioca, tras salir lesionado de la pelea, habría tomado unas cuantas dosis de más de la droga a base de CBD para contener el dolor y, tras eso, su mente se fue a “otra dimensión”.
“Después de la pelea con Thiago, me rompí el pie. Y me dolía mucho. Y estaba tomando CBD, pero no sentía nada, quería sentir menos dolor. Y tomé siete de esos pequeños. Exageré un poco. Debería haber tomado solo uno y tomé siete o cinco. Entonces estaba jo****. Mi novia me trata como a un bebé, y le dije que se alejara de mí, que no quería abrazarla ni estar a solas con ella. Tuve pesadillas locas. Me tomó tres o cuatro días volver (a la normalidad) y luego pensé: ‘Algo anda mal’. Y después de eso dejé de tomarlo porque no es saludable para mí”, recordó Johnny, antes de completar.
“Era otra dimensión. Creía en cosas que no estaban sucediendo. Como, si estuviera aquí y esta (entrevista) estuviera sucediendo, sería como, ‘¿Por qué me mira esta gente? ¿Por qué este tipo me está filmando?’ Me sentí muy incómodo delante de todos. No quería estar allí, solo quería irme. Fue loco. Mi confianza se puso muy baja. Fue horrible. Afectó mi vida”, concluyó.
Luego de iniciar su carrera en la UFC de manera muy prometedora, con tres victorias consecutivas por nocaut, Johnny Walker atraviesa actualmente un momento delicado, habiendo perdido cuatro de sus últimas cinco peleas. Este sábado, el peso semicompleto regresa al octágono para enfrentar a Ion Cutelaba, en la cartelera de la edición 279, que se realizará en Las Vegas.