Este sábado (25), en Abu Dabi (EAU), Jaqueline Amorim regresa al octágono con la misión de extender su racha positiva en la UFC. La brasileña se enfrenta a Mizuki Inoue en la cartelera de UFC 321, con una racha de cuatro victorias consecutivas y lista para demostrar una vez más por qué es considerada una de las atletas más agresivas en la categoría de peso paja (115 lb).
Con un récord de 11 peleas profesionales y 10 victorias rápidas (ocho sumisiones y dos nocauts), la peleadora se forjó una reputación de finalizadora implacable. Su única derrota llegó precisamente cuando la pelea se decidió por decisión de los jueces, en su debut en la organización. Desde entonces, ha demostrado evolución y madurez en la jaula, sin renunciar a su característica postura ofensiva.
«Creo firmemente en mi jiu-jitsu y en el trabajo que realizo durante el campamento de entrenamiento. Siempre quiero terminar la pelea, ya sea por nocaut o por sumisión. Claro que, al más alto nivel, se vuelve más difícil, pero seguiré luchando por el mismo resultado», declaró el atleta en una entrevista exclusiva con Ag Fight.
El estilo agresivo de Jaqueline Amorim también se refleja en su mentalidad. Según ella, entrar al octágono con el objetivo de decidir la pelea es lo que marca la diferencia entre simplemente competir y ganar.
«Creo que cuando entras ahí buscando ese resultado, lo consigues. Si es una pelea a tres asaltos, estaré preparada, pero siempre buscando terminar la pelea en cada asalto «, añadió.
Mantenerse atento a las clasificaciones
Una victoria sobre Mizuki Inoue podría colocar a la brasileña entre las mejores de la división, y la propia luchadora ya tiene planes para el futuro. Al preguntársele sobre sus próximos pasos, admitió que pretende desafiar a rivales clasificadas si gana este fin de semana y que se ha enfocado en las veteranas.
«Creo que sí. Vi a algunas chicas entre las 15 mejores. Vi que Tecia Torres (Pennington) está ahí, Angela Hill también. Creo que son buenas peleas para mí. Creo que, después de esta pelea, es hora de preguntarle a alguien», declaró con seguridad.
Con el regreso de su rival japonesa tras más de un año fuera del octágono (su última aparición fue en septiembre de 2023), Amorim busca mantener el ritmo y la consistencia que la han consolidado como una promesa en ascenso en la UFC. Una nueva victoria no solo reforzaría su emocionante estilo, sino que también podría abrir el ranking para la representante brasileña.
