Tras semanas de impasse e incertidumbre, la posible pelea entre Jailton Almeida y Alexander Volkov comienza a tomar forma. La negociación, que parecía estancada, ganó un nuevo capítulo con una optimista actualización del propio brasileño en las redes sociales.
Sin entrar en demasiados detalles de inmediato, el peso pesado dejó a los fanáticos en alerta al sugerir que se pudo haber encontrado una solución y que el esperado enfrentamiento está más cerca que nunca.
“Me informaron que Volkov no podrá pelear ahora, pero aceptó enfrentarnos en otoño”, publicó el atleta en su cuenta X (antes Twitter).
La señal es significativa, ya que el duelo se consideró para el primer semestre del año, pero no progresó. En ese momento, Volkov mostró poco interés y cuestionó públicamente si ‘Malhadinho’, que entonces ocupaba el sexto lugar en el ranking, merecía una pelea contra él. Desde entonces, el bahiano y su equipo vienen presionando para que la pelea se concrete, incluso con provocaciones y mensajes en las redes sociales.
La pelea había sido programada previamente para UFC 302 en junio de 2024, pero fue cancelada inesperadamente. Durante una entrevista con Ag. Figth, Almeida reveló que el contrato ya estaba firmado, pero la organización cambió los planes sin dar explicaciones claras.
Buena fase
Con dos victorias convincentes en su haber y animado por una actuación dominante contra Sergei Spivak, Jailton Almeida está disfrutando de un gran momento en la división de peso pesado. Su actuación contra el rumano —marcada por el volumen de golpes en pie, una novedad en su estilo— le garantizó un plus de rendimiento y reforzó su nombre entre los principales nombres de la categoría.
Sin un anuncio oficial aún de UFC, la expectativa es que la pelea podría ser parte de una de las carteleras de la organización en la segunda mitad del año, siendo septiembre u octubre las posibilidades más fuertes, especialmente el tradicional evento en Abu Dhabi. Si vence al ruso, que está tercero en el ranking de la categoría, el brasileño podrá empezar a aspirar al cinturón.
