Igor Severino necesitó unos días para calmarse y tratar de comprender qué lo llevó a infligir el infame mordisco a André Lima en UFC Vegas 89, que le costó su récord invicto en MMA, su contrato con la organización e incluso su salario. Ahora, a pesar de no tener aún todas las respuestas, el peso mosca (125 lb) decidió que era hora de romper el silencio.
En una entrevista concedida al sitio web ‘MMA Junkie’, Igor Severino destacó su pesar por el polémico episodio ocurrido el pasado sábado (23). El joven brasileño de 20 años también dejó claro que su actitud en el octágono del UFC Vegas 89 no coincide con lo que realmente es como persona o peleador, y pidió disculpas a todos los involucrados.
“Han sido una locura, unos días locos. Un día estaba peleando en el mejor evento del mundo, estaba haciendo realidad mi sueño. Al momento siguiente, se me excluye del evento. Vengo de orígenes humildes, trabajo desde joven. Salí de mi casa cuando era adolescente para venir a entrenar y llegar aquí. Ver todo esto desaparecer y como era, es algo que no forma parte de mí. No es lo que soy como persona. No es lo que soy como luchador. Me siento muy arrepentido. Me pone muy emocionado y triste. De repente mi sueño se convirtió en una pesadilla”, declaró Igor.
Inexplicable
Ante toda la repercusión negativa que generó la mordedura en el brazo de André Lima durante la segunda vuelta del choque entre ambos, Igor aprovechó los últimos días para reflexionar sobre lo sucedido. Sin embargo, el peso mosca admite que aún no ha encontrado una explicación a su actitud y afirma que no recuerda el fatídico momento.
“Recuerdo todo lo que estaba pasando hasta que me golpeó algo muy duro. Vi el video más tarde y pensé que era un codo. A partir de entonces estuve en piloto automático. No recuerdo nada”, afirmó Igor.
El paraense, sin embargo, sugiere que un duro golpe sufrido en la pelea pudo haber contribuido a que perdiera la conciencia de sus acciones dentro del octágono. Para corroborar la hipótesis que planteó, Severino recuerda que le fue bien en la pelea e incluso fue nombrado ganador del primer asalto por uno de los tres jueces laterales y parte de la comunidad de las MMA.
“Siempre peleé con respeto y cumplí dentro de la jaula. Nunca he hecho nada fuera de los límites del deporte. Para mí, no podía comprender lo que estaba pasando. Si miras la pelea, mucha gente se me acercó y me dijo: ‘Estabas ganando la ronda’. ¿Por qué hiciste eso?’. Vi el video y sí, creo que fue una ronda para cada uno o se podría decir que estaba ganando. No había nada que pudiera justificar el mordisco”, concluyó.
Castigo
Además de ser descalificado, lo que provocó su primera derrota como profesional en MMA, Igor Severino fue inmediatamente despedido de la UFC por Dana White, presidente de la empresa, y también le fue retenida su beca por la Comisión Atlética de Nevada, encargada de regular el Evento de UFC, sábado. El brasileño está de acuerdo con los castigos, aunque considera exagerada la pérdida de salario, pero pide que su carrera no se vea afectada permanentemente.
«Hice algo mal. Es justo que me castiguen. Me eliminaron (de UFC). Creo que esta es una de las peores cosas que podrían haber pasado. El comité retuvo mi beca, así que ni siquiera estoy seguro de recibir algo. No estoy seguro de qué decidirán porque este dinero ni siquiera es para mí. Es para toda mi familia que depende de mí. Peleando es como pago las cuentas, como me las arreglo para pagar el alquiler. Así es como puedo pagar los medicamentos, cómo puedo cuidar a mis familiares enfermos, cómo puedo comprarles comida. Es lo único que sé hacer, es lo único que tengo para ganarme la vida”, concluyó.
El caso
Contratado a través de ‘Contender Series’ en septiembre del año pasado, Igor Severino debutó en UFC el pasado sábado, en la edición ‘Vegas 89’, contra su compatriota André Lima. A pesar de hacerlo bien en la pelea, que tuvo una primera mitad electrizante, el joven de 20 años sorprendió a todos mordiendo el brazo de su oponente en el segundo asalto, cuando intentaba derribarlo y llevar la pelea al suelo.
Tras alertar al árbitro y los gritos de dolor de André, la jugada fue revisada por el ‘VAR’, que confirmó la ilegalidad y descalificó a Igor. Además de la confirmación a través del video, se pudo ver la marca de un mordisco de Severino en el brazo de su oponente, lo que facilitó el trabajo del juez central a la hora de tomar la decisión.