Luego de una década de ausencia del deporte, Evander Holyfield regresa al boxeo profesional este sábado (11), contra el brasileño Vitor Belfort, en una cartelera de Triller que se desarrollará en Florida (EE.UU.). Tras un largo período alejado de las competencias y de haber aceptado la pelea en el último minuto -para reemplazar a Oscar De La Hoya-, el ex campeón mundial llega al enfrentamiento bajo la duda del público hasta qué punto eso puede afectar su actuación ante un rival 14 años menor que él.
Pese a ello, Holyfield garantizó que se encuentra en perfectas condiciones físicas para aceptar el desafío. En una entrevista con el portal web ‘MMA Junkie’, el veterano destacó su rutina de buenos hábitos a lo largo de la vida para justificar su optimismo, y también aconsejó a los jóvenes que sigan su ejemplo, con el fin de mantener sus cuerpos sanos incluso en la vejez.
“Bueno, la cuestión es que estoy en buena forma y estoy cuidando mi cuerpo. No tenía muchos de los malos hábitos que tiene mucha gente y eso es una gran parte de eso. Hablando con los más jóvenes, te cuidas mientras eres joven y cuando envejeces todavía te cuidas. Si te ocupas de ambos lados, estarás bien”, declaró Holyfield.
Campeón mundial en las categorías peso pesado y crucero, Evander Holyfield construyó una carrera victoriosa y se estableció como uno de los más grandes nombres del boxeo profesional de todos los tiempos. El boxeador, que como aficionado ganó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984, tiene récord de 44 victorias, 29 de ellas por nocaut, diez derrotas, dos empates y un ‘no contest’ (sin resultado).
Este sábado, Holyfield regresa al ring y se enfrenta al ex campeón de la UFC Vitor Belfort, en la pelea principal del Triller Fight Club, en Florida, en reemplazo de Oscar De La Hoya, el oponente original del brasileño, en una pelea que se disputará bajo las reglas del boxeo profesional, con ocho rondas de dos minutos cada una. La última aparición del veterano tuvo lugar en 2011, cuando superó al danés Brian Nielsen, por nocaut técnico.