Cuando se trata de comida, Paddy Pimblett puede considerarse un profesional. En esta ocasión, el luchador se fue hasta Irlanda a saciar su hambre, más precisamente a ‘The Black Forge’, un bar propiedad nada menos que de Conor McGregor. Hambriento, el peso ligero de la UFC (155 lb) saboreó un verdadero festín. ‘The Baddy’ también aprovechó para charlar rápidamente por videollamada con ‘The Notorious’.
A través de su canal oficial de Youtube, Paddy compartió la experiencia completa. Durante su estadía en el bar McGregor’s, el deportista degustó hamburguesas, papas fritas, alitas de pollo, parrillada, refrescos y terminó comiendo cheesecake y helado de postre. Durante su breve conversación afable con McGregor, el irlandés jugó con el ímpetu de Pimblett con el cuchillo y tenedor en mano.
“Ya estás ganando todo ese peso de nuevo, hermano. Es muy loco, porque su rostro se ve tan diferente, de inmediato cuando lo miramos”, bromeó Conor.
Paddy también estaba acompañado por la luchadora y amiga de la UFC Molly McCann. Visiblemente emocionada por la oportunidad, la atleta también interactuó por celular con McGregor e incluso se puso una versión del cinturón del irlandés que está expuesto en su barra sobre sus hombros y bromeó: «Es solo cuestión de tiempo (para que conquiste el mío)».
Blanco recurrente de comentarios por su cuerpo ‘efecto acordeón’, Pimblett impresiona con su habilidad para bajar de peso y competir a un alto nivel. Atleta en la división de hasta 155 lb, el inglés llega a pesar más de 198,4 lb en periodos fuera de competencia.
