Julián Márquez vivió un fin de semana inusual. Después de ganar una pelea que parecía perdida el pasado sábado (13), en Las Vegas (EE.UU.), el peso mediano de la UFC (185 lb) aprovechó para invitar a la cantante Miley Cyrus a pasar ‘San Valentín’ con él. Sin embargo, lo que parecía ser el comienzo de un coqueteo resultó ser poco tiempo después.
El atleta nunca ocultó ser fan de Miley Cyrus e incluso eligió una canción de la cantante para ingresar al octágono del UFC 258 contra Maki Pitolo. A su vez, Cyrus, quien fue cortejada por el deportista durante la transmisión de ESPN, aceptó la invitación, pero exigió que Julian se afeitara el pecho y dejara las letras ‘MC’ (iniciales del cantante) en su pecho.
Para tristeza de los fanáticos que estaban entusiasmados con el posible romance, el profesional “se lo puso difícil”. En sus redes sociales, Márquez le pidió a Miley que se hiciera un tatuaje temporal con su apodo ‘Cuba Missile Crisis’ encima del ombligo. Entonces, la cantante respondió a través de la misma herramienta y rompió el corazón del deportista al poner punto y final a la breve historia de amor.
«Si te haces un tatuaje de henna ‘Cuba Missile Crisis’ por encima del ombligo, como 2Pac, estoy dentro #ThugLife», escribió el luchador en su cuenta oficial de Twitter.
“Di no a las mariquitas. Di VAMOS A ESTO para usar dos sombreros y pasar un buen rato. Tíralo”, publicó Miley en las ‘historias’ de su cuenta oficial de Instagram.
A pesar de su mala suerte en el amor, Julián Márquez tuvo suerte en el juego. El atleta, que no había jugado desde julio de 2018, regresó al octágono con una victoria sobre Maki Pitolo y también ganó uno de los bonos de $50,000 por ‘performance de la noche’ en UFC 258. En MMA, el estadounidense, de 30 años, tiene diez peleas, ganó ocho, todas ellos por la vía rápida (seis nocauts y dos sumisiones) y perdió otros dos.
