Este sábado (22), UFC llega por primera vez en la historia a Arabia Saudita. Y el evento con sede en la capital, Riad, está lejos de ser una mera coincidencia. En los últimos años, el país de Oriente Medio ha invertido mucho en deportes para atraer la atención del mundo. Y en las modalidades de combate no ha sido diferente. Después de albergar algunas de las peleas de boxeo más populares de esta temporada, el país también intenta convertirse en una especie de gran recinto deportivo para las artes marciales mixtas.
Con una economía fuerte impulsada por la producción y las exportaciones de petróleo, Arabia Saudita puede invertir fuertemente en el sector deportivo a través del Fondo de Inversión Pública, el más activo del mundo en 2023, según CNN. A través del fondo, el gobierno local compró una parte de la PFL –liga de MMA– en 2023. Meses después, el país recibe por primera vez la organización de este deporte más grande del planeta: UFC.
Y para su debut en suelo saudí, UFC quiere impresionar a los inversores locales. Después de todo, el ‘evento principal’ de la cartelera involucraría a Khamzat Chimaev – invicto y extremadamente popular – y Robert Whittaker – excampeón y número 3 del mundo en la categoría de peso medio. Sin embargo, al encontrarse enfermo, el ‘Lobo’ acabó abandonando la pelea y fue sustituido por el prospecto ruso Ikram Aliskerov. El evento también cuenta con otros grandes nombres de la compañía en acción, como Sergei Pavlovich, Kelvin Gastelum y Johnny Walker.
Mezcla de nacionalidades
Además de buscar nuevas sedes deportivas financieramente sólidas, UFC también promueve cada vez más la internacionalización de su marca. Y prueba de ello es la cada vez mayor diversificación de las nacionalidades de los deportistas presentes en la plantilla de la empresa. Para el evento en Arabia Saudita, 11 países estarán representados por los 22 luchadores que entrarán en acción: Brasil, Estados Unidos, Rusia, China, Corea del Sur, Australia, Marruecos, Dinamarca, Bahréin, Tayikistán y Suiza.
Inversión en fútbol
Antes de centrar su atención en los deportes de combate, el Gobierno de Arabia Saudita invirtió mucho en el mundo del fútbol para atraer la atención del mundo. Con salarios astronómicos, el país atrajo la temporada pasada a grandes estrellas de este deporte, como Cristiano Ronaldo, Neymar Jr y Karim Benzema, que actualmente desfilan por las canchas del Campeonato Saudí.