El 22 de enero, Francis Ngannou y Ciryl Gane medirán fuerzas para la unificación del título de peso pesado de la UFC. Si ahora los dos luchadores se posicionan como rivales en el mayor escenario de las MMA del mundo, en el pasado ambos compartieron entrenamientos en el mismo equipo, la ‘MMA Factory’, de la que el camerunés ya no forma parte. Sin embargo, el periodo en el que el africano representó a la academia con sede en París (Francia) todavía resuena y genera polémicas, que echan más leña al fuego en la rivalidad entre las estrellas de la compañía.
El ambiente entre el campeón lineal de peso pesado y su antiguo equipo no es la mejor, como se pudo ver recientemente en los bastidores del UFC 268, cuando Francis se limitó a ignorar la presencia de Gane y de su antiguo entrenador, Fernand López. Y según el dirigente de la ‘MMA Factory’, este no fue el primer episodio en el que Ngannou fue descortés con él y con su pupilo.
En una entrevista concedida a ‘The MMA Hour’, Fernand López reveló que Francis Ngannou habría aconsejado en el pasado a uno de los casamenteros de la entidad que no fichara a Ciryl Gane, alegando que el entonces compañero no estaba aún preparado para formar parte del roster del principal evento de las MMA del planeta.
«En ese momento (al principio de la carrera de Ngannou), lo que hacía era que cada vez que ellos (los luchadores de MMA Factory en la UFC) tenían una entrevista, les pedía que dijera el nombre de Francis Ngannou, que lo dejaran escapar. Así que cada vez que tenían una entrevista, decían: ‘Oh, tenemos mucho talento, pronto conocerás a Francis Ngannou’. Así es como intentaba construir su nombre. Así es como empujaba a los chicos», relató López.
«En realidad hice lo mismo con Ciryl Gane. Intenté que firmara con (la UFC a través de) Mick Maynard. Y cuando Francis volvió de (Las) Vegas, me dijo: ‘Hablé con Mick y me preguntó si el nuevo chico del gimnasio llamado Ciryl Gane era bueno’. Y yo dije: «Ah, sí, ¿lo hizo?». Y me dijo: ‘Sí, pero ya sabes, porque la gente de los emparejamientos esperaba que yo hablara muy bien del tipo, no lo hice, dije que era un poco bueno, pero que aún no era lo suficientemente bueno para la UFC’. Eso salió de la boca de Francis Ngannou. Para él, esa fue una estrategia para que Mick Maynard no sospechara que él y yo estábamos en la misma página, lo cual no es cierto», concluyó el entrenador.
Los rivales dirimirán sus diferencias dentro del octógono el próximo 22 de enero, en el UFC 270, que debería celebrarse en California (Estados Unidos). El duelo pone frente a frente al campeón lineal Francis Ngannou y al dueño del cinturón interino Ciryl Gane, en lo que definirá al soberano indiscutible de la división de peso pesado de la UFC.
