Casado con uno de los nombres más grandes en la historia del jiu-jitsu y graduado de cinturón marrón en la modalidad, el actor Malvino Salvador pronto podría dejar de lado sus obras de teatro y trabajos en cine y televisión para incursionar en una competencia deportiva. Al menos eso reveló el propio artista, en una entrevista exclusiva con Ag. Fight.
En Las Vegas (EE.UU.), donde asistió el pasado fin de semana a la inducción de su esposa, Kyra Gracie, al Salón de la Fama de la ADCC (el principal evento de grappling del mundo), Malvino Salvador habló con el equipo Ag. Fight y , consultado sobre si estaría interesado en participar en alguna competencia del arte suave, admitió que sí puede competir, pero en otra modalidad de deportes de combate: el boxeo.
“Tal vez habrá un combate de boxeo. Llevo 13 años boxeando. Allá en Balneário Camboriú. Es un gran evento. Están viendo si pueden conseguir un oponente. Vamos a ver. Ya me estoy preparando, estoy entrenando todos los días (risas)”, bromeó Malvino.
Nacido en Manaus (Amazonas), Malvino Salvador comenzó a entrenar jiu-jitsu a los 18 años y, antes de mudarse a São Paulo en el año 2000 para iniciar su carrera como modelo y actor, incluso participó en una de las competencias en el arte suave, ocupando el tercer lugar en ambas ocasiones, según él mismo. Luego de un período en el que estuvo alejado de las colchonetas, el brasileño volvió a entrenar alrededor de un año antes de conocer a su esposa Kyra, quien forma parte de la tradicional familia Gracie, responsable de difundir el jiu-jitsu en todo el mundo.
