Rafael Dos Anjos fue campeón de los pesos-ligeros (70 kg) del UFC – Diego Ribas
Aún a los 34 años y con una carrera consolidada, Rafael dos Anjos parece incansable. Escalado para enfrentar a Leon Edwards este sábado (20), el brasileño completará su cuarto desafío en 13 meses, media que llama la atención, aún más por tratarse del número cuatro del ranking de los wélters (77 kg) del UFC.
Sin embargo, medirá fuerzas con el número 12 de la lista y encima después de un campamento de sólo cinco semanas (tres menos de lo que es considerado ideal) el motivado es por una razón especial. De acuerdo con RDA durante entrevista exclusiva con el reportero de la Ag. Fight, el pedido fue realizado directamente por Dana White, presidente del evento.
“A último momento, cuando acepté la pelea con Kevin Lee, faltaban siete semanas y en cinco yo estaba listo. Por eso acepté en el momento. Estaba de vacaciones, viajando con mi hijo del medio, y recibí el mensaje de Dana White de que él necesitaba un main event en julio, en Texas”, recordó, revelando que no tuvo problema de hacerle el favor al jefe en su cronograma. Hasta porque él fue recompensado por esto.
“Miré mi calendario, faltaban cinco semanas. Negociamos una cosa buena por este motivo de tener la noticia sobre la hora. Él me ‘dio una moral’ y resolvemos tomar la pelea porque no es todo los días que Dana White pide un favor”, narró.
Curiosamente, si no fuera por el pedido del mandamás, probablemente el propio Dos Anjos pediría por una fecha para presentarse en el octágono en breve. Finalmente, el wélter brasileño asegura que no piensa en disminuir el ritmo incesante de combates.
“Pretendo aún aumentarlo (el ritmo). Estoy en mi mejor momento, a los 34 años. No es un campamento de cinco semanas, es un campamento-campamento de la vida entera. tengo mucho lastre de entrenamiento. Es caer dentro. Tengo tres hijos y no tengo tiempo para descansar (risas)”, bromeó.
Tras finalizar a Kevin Lee en mayo y hacer las paces con la victoria, Dos Anjos ahora tendrá la oportunidad de quitarse una piedra en el zapato. En sus últimas cuatro peleas, él enfrentó atletas buenos en lucha libre, lo que hizo que su entrenamiento sea prácticamente el mismo por dos años.
“Creo que fue bueno, porque es un tipo que viene más para la pelea, no es un tipo que va a llegar a la reja y quedarse intentando tomar tiempo allí y tomar la lucha. Es un tipo que va a jugar más abierto, un tipo más del MMA, tiene un buen striking, buen jiu-jitsu, buena lucha libre también. Va a hacer la mezcla. Creo que va a ser positivo”, finalizó.
