Derrick Lewis, que batió récords por nocaut en la historia de la UFC, es posiblemente uno de los luchadores con mayor capacidad para entretener a los fanáticos de las MMA en la actualidad. Pero este sábado (7), el peso pesado tendrá un duro desafío por delante, cuando se enfrente al francés Ciryl Gane, en el evento principal de UFC 265, en Houston (EE.UU.), la ciudad natal del estadounidense.
En declaraciones a la prensa durante la jornada mediática del evento, Lewis destacó su deseo de brindar un gran espectáculo a los fanáticos que estarán presentes en el ‘Toyota Center’ en Houston, pero admitió que su misión podría verse obstaculizada por la estrategia y el estilo de juego pragmático de Gane, al que calificó de “molesto”. Aun así, el estadounidense prometió hacer todo lo posible para intentar despachar a otro oponente por el carril rápido.
“No es que no esté apto para cinco asaltos, es solo que no será emocionante (pelear) durante cinco asaltos porque es un peleador aburrido. Le gusta mantenerse alejado y lanzar muchas patadas bajas y cosas así, pero realmente quiero tener una pelea emocionante aquí en mi ciudad natal. Ganar, perder o empatar, quiero que sea una pelea emocionante”, reflexionó Derrick Lewis, antes de completar.
“Es entrenador y eso es bueno para él. Creo que es un buen luchador, ¿sabes? No lo sigo mucho. Realmente no sigo su carrera, pero eso es bueno para él”, concluyó.
El duelo entre Derrick Lewis y Ciryl Gane, número dos y tres en el ranking de peso pesado, respectivamente, tendrá en juego el cinturón interino de la división. El ganador del choque, por tanto, garantizará la oportunidad de unificar el título contra el actual campeón lineal, el camerunés Francis Ngannou, en la secuencia.