El comienzo de la última caminata de Dequan Townsend no fue alentador. Además de ser noqueado en el debut de su compañía en junio de 2019, el peso promedio (84 kg) dio positivo en un examen realizado por USADA el día antes del evento por cocaína y fentanilo, sustancias prohibidas por la política reguladora de UFC.
Este miércoles (8), la USADA oficializó la suspensión de seis meses a través de una declaración oficial en su sitio web. La entidad explicó que, debido a la naturaleza de las sustancias que se encuentran en el cuerpo de Dequan, se aplicó una reducción de la penalización, por lo que ‘La Tarántula’ no cumplirá con el protocolo de dos años, sino solo seis meses. Pero para eso, el atleta estadounidense tendrá que completar con éxito un programa de rehabilitación.
“Townsend, de 33 años, dio positivo por benzoilecgonina, un metabolito de cocaína y norfentanilo, un metabolito de fentanilo y sus derivados, como resultado de una muestra competitiva de orina que proporcionó el 28 de junio de 2019 en UFC Fight Night Minneapolis, donde perdió por TKO. La cocaína, un estimulante no especificado, y el fentanilo, un narcótico específico, están prohibidos en la competencia y se consideran Sustancias de Abuso bajo la Política Antidopaje de UFC”, expresa el comunicado, antes de introducir la reducción de la pena.
«De acuerdo con la Política antidopaje de UFC, los atletas pueden recibir una sanción reducida por abuso de sustancias si pueden establecer de manera preponderante evidencia de que la violación no mejoró y no tenía la intención de mejorar el rendimiento del atleta en una pelea y más tarde completar un programa de rehabilitación de drogas», confirmó la USADA.
La suspensión de seis meses es retroactiva a la fecha en que se examinó a Dequan: 28 de junio de 2019. De esta manera, el luchador estadounidense ya puede competir nuevamente si cumple con los requisitos de la USADA. Según el sitio web ‘MMA Fighting’ inclusive, el peso mediano está listo para actuar en UFC Raleigh, programado para el 25 de enero.
