Demian Maia elige eficiencia del jiu-jitsu como razón para longevidad en el MMA
por
Redação Ag. Fight
Demian Maia es el brasileño con el mayor número de victorias en el UFC – Leandro Bernardes
Demian Maia ya marcó su nombre en el UFC como uno de los principales representantes del jiu-jitsu de la historia de la organización. En acción en la mayor liga de MMA del planeta desde octubre de 2007, el brasileño acumula una retrospectiva de 20 victorias -diez de ellas por finalización, número que lo coloca como brasileño más victorioso de todos los tiempos en la compañía. A los 41 años, el ahora veterano sigue en actividad y, aunque comenta abiertamente sobre un posible retiro, aún no revela cuándo colgará los guantes. Tal vitalidad no habría sido conquistada por casualidad si no fuera, de acuerdo con el propio atleta, por la eficiencia del arte suave en los octágonos.
Al enfrentar al wélter (77 kg) Anthony Rocco Martin en el evento del próximo sábado (29) en Minnesota (EUA), Demian difícilmente buscará el intercambio. Especialista en la lucha agarrada, el campeón de 2007 del ADCC (mayor torneo de sumisión del mundo) suele buscar la finalización desde el comienzo de los enfrentamientos. De este modo, partiendo hacia el clinch, no suele recibir un número significativo de golpes en la cabeza, como lo que ocurre con practicantes de otras modalidades de combate, lo que minimiza la posibilidad de lesiones cerebrales –como por ejemplo las relatadas recientemente por Wanderlei Silva y, Renato ‘Babalu’.
«Yo recibo pocos golpes. Cuando tuve aquella racha de siete victorias, recibí seis golpes, algo así. Y no necesariamente en la cabeza. Y yo tengo cuidado en el entrenamiento también. Entonces, eso es otra cosa en la que el jiu-jitsu está al frente: usted consigue tener una carrera larga y sin quedarse con trauma cerebral en la post-pelea. El peleador de boxeo o muay thai, si no es un tipo técnico y con estilo de pelea más de contraataque o de gran movimiento de pierna, tendrá secuelas al final de la carrera», destacó en una entrevista exclusiva al reportero de Ag. Fight.
Sobre los motivos para continuar en acción, incluso con una carrera consolidada y con la independencia financiera adquirida a cuenta de ello, Demian elige dos atributos. «En primer lugar, la parte personal, porque me gusta mucho competir, pelear, entrenar … Y esto me estimula mucho. Y, en segundo lugar, es estar representando el jiu-jitsu brasileño, que es una cosa que tome como misión, que tengo ganas de hacer, y como todavía estoy bien físicamente, tengo ganas de hacer un poco más aún», apuntó el ex-desafiante al título del UFC.
A pesar que aún no ha revelado con certeza cuándo quiere parar, Demian ya ha destacado que está cerca del final de su carrera. Desde que debutó en el MMA profesional, en 2001, conquistó la victoria en 26 de las 35 veces en que compitió. Y, consciente de que no tiene nada que probar, él sigue con la misión que se impuso: divulgar el jiu-jitsu mundialmente en la mayor vitrina del mundo de las artes marciales mixtas: el UFC.
«Yo entro allí para mostrar el estilo de pelea del jiu-jitsu, el estilo de pelea que entras y consigue pelear de una forma inteligente, consigue ganar a veces sin tener que dar un golpe o sin tener que lastimarte. Entonces, estoy mucho más preocupado en divulgar e influenciar a las personas a ir al jiu-jitsu, que probar la esencia del jiu-jitsu. Esto ya ha sido probado y es probado cada día. Tanto que cualquier peleador del UFC tiene que saber jiu-jitsu, sino él no tendrá éxito», concluyó.