Después de la sorpresa de ver que dio positivo en una prueba para COVID-19 y que su participación en la ‘Isla de la Lucha’ se puso en riesgo, Deiveson Figueiredo fue liberado para competir el domingo (12). Según su gerente, Wallid Ismail, el atleta viajará esta noche a Abu Dhabi, donde seguirá el protocolo de nuevos exámenes y cuarentena de 48 horas.
Según el equipo de peso mosca (57 kg), Deiveson contrajo el virus en mayo. En ese momento, completó el período de cuarentena y se curó de la enfermedad, volviendo al entrenamiento después de dos semanas. Por lo tanto, lo que se habría detectado en el primer examen sería la presencia de anticuerpos en el atleta.
“Incluso la segunda prueba fue negativa y hoy viaja en un avión privado a Abu Dhabi. Solo podemos agradecer el esfuerzo de todo el personal de UFC que no escatimó esfuerzos para aclarar la situación y permitir que la lucha suceda. Deiveson está volando para ser campeón”, dijo Wallid durante una breve conversación con el informe Ag. Fight.
También según el informe, Deiveson habría dado negativo en otra prueba, esta vez de sangre, que habría demostrado la existencia de anticuerpos y atestiguado que el virus está inactivo. Por lo tanto, el brasileño solo espera la finalización de los procedimientos de protocolo en Abu Dhabi para enfrentar a Joseph Benavidez el 18 de julio, en un duelo válido por el título vacante del peso mosca.