Desde que comenzó su carrera en el evento de MMA más grande del planeta, Daniel Santos ha tenido que lidiar con un destino incómodo: la frecuente cancelación de peleas. En total, fueron cinco peleas canceladas y tres disputadas en el octágono de UFC, un récord que claramente obstaculizó el desarrollo de la carrera del peso gallo brasileño (135 lb).
Ahora, en vísperas de su regreso tras un largo paréntesis provocado por dos compromisos más incumplidos, ‘Willycat’ reflexiona sobre las consecuencias de la situación que ha vivido en los últimos años.
En una entrevista exclusiva con Ag. Fight, Daniel se sinceró y reveló cuánto impactaron en su vida, tanto personal como profesional, las oportunidades perdidas debido a las diversas cancelaciones de peleas en UFC. De hecho, consciente de que parte del problema fue causado por errores que él mismo cometió, el atleta minero destacó que utilizó las experiencias negativas para aprender lecciones importantes para la continuidad de su carrera.
«Desafortunadamente, ya tenemos experiencia. Es parte del deporte, las lesiones son parte de lo que hacemos; es un deporte muy agresivo, con mucha fuerza y mucho contacto. Lo que podemos hacer es evitarlo planificando mejor el entrenamiento, la carga de entrenamiento y la intensidad a medida que se acerca la pelea. Estoy aprendiendo, me sirvió de experiencia. Aprendí mucho de mis lesiones y de lo que pasó», dijo Daniel Santos, quien se enfrenta a Davey Grant en UFC Vegas 105 este sábado (5).
Entre las principales lecciones aprendidas de estos momentos vividos, el peleador brasileño destaca la necesidad de controlar la intensidad de sus entrenamientos, para evitar nuevas lesiones que lo alejen nuevamente del octágono. Este tema incluso ha generado algunas críticas hacia el equipo ‘Chute Boxe Diego Lima’, del cual ‘Willycat’ forma parte, dado que, además del peso gallo, otros atletas del gimnasio ya han sufrido cancelaciones en vísperas de sus peleas en UFC debido a lesiones sufridas en los entrenamientos, como ocurrió con el ex campeón de peso ligero (155 lb) Charles Oliveira, principal exponente del equipo paulista.
«Era un chico al que le gustaba entrenar al máximo todo el tiempo. No me gustaba irme del entrenamiento y decir: ‘Sigo estando bien, podría haber dado más, no me cansé’. Fue un error, fue un poco amateur de mi parte pensar así . Es algo que hemos estado ajustando, trabajando, y ahora todo está bien. Esta vez aprendí que tengo que dosificar más mi entrenamiento, dosificar las cosas, periodizarlo, eliminar los excesos. Las peleas se cancelaron y los campamentos en los que me lesioné fueron una gran experiencia de aprendizaje», enfatizó.
Préstamo
Además del impacto en el desarrollo de su carrera, la vida financiera de Daniel Santos también se vio afectada por las cancelaciones de peleas. Esto se debe a que, al no poder competir, el minero vio afectada su cuenta bancaria y, sin alternativas, tuvo que buscar ayuda entre sus allegados para poder mantener al día los pagos del hogar.
«Todo luchador solo cobra cuando pelea. La situación económica es muy difícil. Gracias a Dios, tengo gente a mi lado: mi representante, mis amigos, que me ayudaron. En un momento dado, incluso me prestaron dinero para mantenerme. Ahora estoy tranquilo, voy a pelear, trabajar y devolver el dinero. Dos años sin pelear, dos años sin trabajar. No puedes mantener tu casa ni darle una buena vida a tu hija; tengo una hija pequeña. Sigo trabajando, sigo enseñando, pero en algún momento tuve que pedirle dinero prestado a mi representante para hacerme más fuerte», dijo ‘Willycat’.
Este sábado, Daniel Santos regresa al octágono más famoso del mundo luego de una pausa de casi dos años en su carrera, para enfrentar al inglés Davey Grant, en la cartelera preliminar de UFC Vegas 105. Durante este periodo fuera, el peleador brasileño tuvo dos peleas canceladas en la organización -una contra Daniel Marcos y otra con Said Nurmagomedov-, en ambas ocasiones, la cancelación se debió a motivos directamente ligados a él.
